México es el país del mundo más beneficiado por la nueva Guerra Fría encabezada por Estados Unidos y China.
Lo anterior representa una oportunidad para atraer inversión extranjera y hacer crecer la economía mexicana, según Bloomberg.
Y es que hay una reconfiguración del comercio mundial, provocada por las tensiones entre Estados Unidos y China. Ante esta situación, México es el país más atractivo para inversionistas por las siguientes razones:
Estados Unidos ya no quiere que sus rivales geopolíticos, como China sean sus principales proveedores de bienes, por lo que ahora prefiere países más cercanos para las importaciones y su mejor opción es, sí, el país mexicano.
Por lo anterior, en los últimos años, la nación presidida por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se posicionó como el principal proveedor de bienes de Estados Unidos, logrando superar a China.
Además de su ubicación geográfica, México ha tenido este año un aumento del 40 por ciento en inversión extranjera directa debido a que su moneda es una de las más fuertes del mundo y tiene uno de los mejores mercados bursátiles, de acuerdo con Bloomberg.
Una de las entidades del país más beneficiadas por el nearshoring es Nuevo León, donde desde el año 2021 se han instalado al menos 30 empresas, como Tesla, AGP fabrica parabrisas, DSBJ piezas electrónicas de origen chino, la firma italiana Brembo de frenos, entre otras, informó Iván Rivas Rodríguez, secretario de Economía del estado.
Además desde ese entonces, otras empresas de la industria automotriz como General Motors, Kia Motors y BMW, anunciaron inversiones en vehículos eléctricos en México, mientras que fabricantes de productos electrónicos electrodomésticos se instalan en entidades del centro del país.
Lo anterior trae grandes beneficios al sector inmobiliario y de la construcción, que registran inversiones de millones de dólares.
¿México aprovechará su oportunidad de oro que le trae la nueva guerra fría?
Aunque México parece tener todo para impulsar su crecimiento, no es así. Y es que los recursos naturales de Nuevo León son insuficientes, aunado a las elevadas tasas de interés y una economía informal arraigada, explicó Gabriela Siller Pagaza, directora de análisis económico de Banco Base.
“El nearshoring es una oportunidad para México. No la estamos aprovechando al máximo”, dijo la especialista.
Para que el nearshoring dé frutos y el crecimiento sea más rápido, especialistas esperan que se recupere la inversión interna con la llegada de empresas internacionales, de lo contrario México sólo se dedicará a importar piezas para ensamblar y exportar, lo que tiene poco valor agregado a nivel local.
Aunque es conocido como antiempresarial, el presidente Andrés Manuel López Obrador busca evitar lo que ocurrió hace tres décadas con el Tratado de Libre Comercio (TLC), el cual permitió que las empresas se instalarán sólo en una región del país.
“Se está procurando que el crecimiento en México sea más horizontal”, dijo el mandatario federal, quien afirmó que son bienvenidas las empresas extranjeras, pero deben instalarse de manera uniforme en todo el país.
Por su parte Gerardo Esquivel, ex subgobernador del Banco de México, estima que el nearshoring dará un impulso a la economía del país, “incluso si México no hace nada” y esto se debe a su integración a Estados Unidos, por cuestiones geográficas y los acuerdos de libre comercio.
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