Aunque todos los dirigentes de partidos políticos aseguraron que habían resultado ganadores en las elecciones del pasado domingo en el Estado de México y Coahuila, la verdad que no se ha destacado, es que el abstencionismo de los electores fue el que obtuvo la mayoría, pues precisamente esos partidos políticos que se supone tienen como propósito fundamental el lograr que la población salga a elegir a los candidatos, no lo lograron.
Acá en el terruño veracruzano, los precandidatos que ya andan en campaña, aunque oficialmente ningún partido político ha definido aún quienes serán los abanderados o abanderadas, saben que el mayor reto que tienen enfrente no es el de los otros candidatos, sino el conseguir que la mayoría de la población que se ha abstenido de salir a votar a las urnas, en esta ocasión sí lo haga el año entrante.
Pero para ello tienen que empezar a presentar sus propuestas, no basta con mandar a poner espectaculares -costosos, por cierto- con la foto del aspirante, sino que lo que la gente quiere son propuestas de solución a sus problemas. Cómo le van a hacer para enfrentar la crisis de seguridad, desempleo, inflación, salud, educación etc.
Así las cosas, en un balance de los resultados de las elecciones del pasado domingo que deben de servir de referente para las elecciones en Veracruz el año entrante, de la agencia Integralia considera que:
Morena es el ganador político de la jornada: triunfó en la entidad más poblada del país y el bastión histórico del PRI. Con ello gobernará, aproximadamente, al 67.8% de la población a nivel nacional. Aunque la coalición opositora sufrió una derrota significativa en el Estado de México, lograron remontar un margen frente a la puntera que al inicio de la campaña era de 20 puntos (terminaron en 8.3) y en Coahuila su candidato por un margen de 35.4%.
Nueva configuración del poder político: Morena y sus aliados gobernarán en 23 entidades, es decir, ⅔ partes de la población del país. Se gesta la sensación de un triunfo inminente en 2024 y se beneficia la candidatura de Claudia Sheinbaum, quien apoyó la campaña en Edomex y podría argumentar que la CDMX es recuperable una vez que se ganó en la entidad colindante.
INE e institutos electorales locales dan buenos resultados como siempre: organizaron elecciones confiables y solo una casilla no se instaló entre más de 24 mil en ambas entidades. El PREP y los conteos rápidos dieron certeza.
Futuro de Va por México: PAN, PRI y PRD han ratificado la coalición y anunciaron que el 26 de junio darán a conocer el método para elegir su candidata/o a la presidencia.
Para ser competitiva, la alianza requiere: un proceso de selección abierto, transparente, incluyente y, sobre todo, atractivo mediáticamente; y que la persona elegida tenga capacidad de comunicar un relato persuasivo sobre lo que representa la alianza, las causas que defiende y por qué su oferta es superior a la promesa de continuidad del gobierno de AMLO.
Ánimo social favorece a Morena hacia 2024: hay un buen ánimo social por la marcha de la economía y la esperanza de que el país va por buen rumbo (como lo señalan las encuestas), lo cual favorece las candidaturas oficiales al margen de los atributos de las personas candidatas. Frente a esa realidad, la oposición carece de una visión alternativa que emocione a un electorado que confía poco en los partidos y no percibe motivación alguna para acudir a votar.
Las encuestas no fueron confiables: sobreestimaron a la candidata de Morena en Edomex casi el doble de lo que realmente ganó y en Coahuila subestimaron el margen de triunfo del candidato de la coalición encabezada por el PRI.
Consulta nuestra página: https://www.xn--bitacoraspolticas-ovb.com/