Analizar los datos de tu celular como el tiempo que pasas en redes sociales o las fotos que tomas ya son insuficientes para saber si eres un buen pagador. Empresas como Aviva usan la inteligencia artificial para dar microcréditos a personas en la informalidad analizando los gestos, palabras y tono de voz al hacer una videollamada.
Filiberto Castro y David Hernández, cofundadores de Aviva, cuentan a Expansión que bajo una licencia de Sofom, la empresa buscará convertirse más tarde en un banco digital, que pueda competir con bancos como Compartamos, Banco Azteca o Coppel.
“Decidimos salir primero con una estructura legal y corporativa que nos permitiera ofrecer productos de crédito, que es donde debemos una falta de disrupción enorme en el segmento. Vamos a dar préstamos a plazo fijo y muy pronto tarjetas de crédito”, dijo Castro.
¿Cómo saben si eres un buen pagador?
Al dirigirse a la base de la pirámide, que puede trabajar en la informalidad o tener menores ingresos, Aviva sabe que sus clientes no cuentan con un teléfono de gama alta que les permita hacer un análisis de su comportamiento en redes sociales, por ejemplo.
Tras una inversión de 2.2 millones de dólares en su ronda pre semilla, la empresa ha desarrollado un sistema para que analice la capacidad de pago de los clientes, aun cuando este no cuente con un producto financiero formal como una tarjeta de débito.
«Nuestros modelos se basan en información ya aprobada como el buró de crédito e información de otros proveedores que te dicen, por ejemplo, cuánto tiempo tiene su línea telefónica», cuenta Hernández.
Además, en la videollamada se analiza la información en niveles de audio y video, por ejemplo, las microexpresiones del cliente en la llamada, cómo voltea los ojos al contestar preguntas, la dilatación de las pupilas y detectar el ritmo cardíaco.
«Otra fuente de información es el audio, nos ayuda a detectar patrones de cuando una persona nos está mintiendo. Las personas que mienten, tardan más en contestar o van a titubear», asevera.
Todos estos comportamientos ayudan a las empresas a saber cuáles son las probabilidades de que caiga en impago. Los fundadores de Aviva cuentan que si bien la inteligencia artificial ya se usa en otros campos, no se ha usado de esta forma en el sistema financiero.
Aviva no cuenta con sucursales o islas en centros comerciales para atraer clientes. La firma tiene pequeños kioscos en Chalco, Ixtapaluca y Texcoco, donde hay una gran afluencia de peatones que pueden ser potenciales acreedores de un préstamo.
«Cuando hicimos la investigación de mercado vimos que hay 649 hay pequeñas localidades en México con menos de medio millón de habitantes que tienen 10% de inclusión financiera», añade Hernández.
Hasta el momento, Aviva ha dado hasta 500 microcréditos y en febrero de 2023 planea lanzar su tarjeta de débito. Esperan que su licencia como banco digital les tome hasta 36 meses.
Expansión
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