El antes llamado “Día del gobernador” pasó sin pena y menos gloria. El pasado miércoles 16 allá en la lejana ciudad de Pánuco, acompañado solo por su candidata, la zacatecana Rocío Nahle García, y unos dos mil acarreados, entre ellos los miembros del Congreso Local, nuestro gobernador el profesor universitario Cuitláhuac García Jiménez, leyó ante los presentes lo que para él fue su cuarto informe de gobierno el cual hoy desglosan (vaya chamba) sus colaboradores, los que dependen del poder Ejecutivo. En realidad tuvo razón el gobernante al irse tan lejos a decir por allá lo que dijo, aquí no se hubiera librado de los grupos de inconformes que ha construido y que le han ayudado a construir sus inútiles colaboradores. Ya imaginamos a esos paisanos rodeando el palacio legislativo colocando mantas alrededor y empujándose con los policías antimotines porque lo que a estos encabronados ciudadanos les interesa es decirle en propia cara sus verdades al culpable de tanta inseguridad; de los muertos y enfermos graves que permanecen en los hospitales a la buena de Dios porque no hay medicinas para medio paliar sus dolencias; a los universitarios reclamando la entrega completa del presupuesto con su correspondiente cuatro por ciento más en relación con el del año pasado, tal como lo dice la ley; a las decenas de madres de desaparecidos que nadie les hace caso desde hace cuatro años; a los simpatizantes de “El Potro” desaparecido misteriosamente y a quien extrañan miles de familias porque la CFE ya los está jodiendo con el cobro de sus recibos de consumo con cifras estratosfericas que por supuesto no podrán pagar; a los grupos de afectados vecinos de Coatepec, por el pésimo papel que ha hecho en este año el alcalde Raymundo Andrade, un alcohólico a quien manipulan desde la Secretaría de Gobierno y otros tantos más, veracruzanos ofendidos por esta administración que sigue ofreciendo hacer y ni por donde comienzan a pesar de tener cuatro años el poder. Pero eso sí, buenos para deslindarse de responsabilidades y culpar al paso de todo lo malo que nos pasa, como si cuatro años no habrían sido suficientes para enderezar la nave. Informes de gobierno los de Hernández Ochoa, Acosta Lagunes, Gutiérrez Barrios y Dante Delgado, competían para sobresalir como el gobernante que pasaría a la historia por sus grandes obras en favor de los veracruzanos… Hoy las cifras rondan en torno a homicidios dolosos, desaparecidos, feminicidios, extorsiones, es decir son informes de nota roja… Que pena.