El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó que su administración haya presionado al juez que analiza los recursos contra el Tren Maya para que éste revocara las suspensiones provisionales que había otorgado para frenar el tramo 5 de la obra.
Por el contrario, remarcó, lo que se hizo fue entregar toda la documentación que el juzgador solicitó para el análisis del caso.
Asimismo, remarcó que los propietarios de los 36 terrenos expropiados por la administración federal para el paso de ese polémico trayecto aceptaron la decisión y el pago por sus tierras marcados en los avalúos correspondientes.
Interrogado en la mañanera de este jueves en torno a esa obra y señalamientos de que su gobierno habría presionado al titular del juzgado primero de distrito con residencia en Yucatán, Adrián Fernando Novelo Pérez –quien había otorgado varios amparos contra la obra—, el mandatario acotó: “Cree el león que todos son de su condición”. Esto en alusión a sectores de la oposición.
“Nosotros no ejercemos presión contra nadie y lo que hicimos en el caso del Tren Maya fue presentar toda la información que nos solicitaron y además hacer uso de la facultad que tenemos para declarar una obra de interés público, de interés nacional, de seguridad nacional y eso fue lo que hicimos”, remarcó el jefe del Ejecutivo federal.
López Obrador refirió que mientras se resolvía el tema de los amparos, el gobierno federal emitió un decreto que consideró obra de seguridad nacional al proyecto, lo que permitió avanzar en la obra que se había detenido por tres meses a causa de que el juzgador otorgó las suspensiones provisionales, las cuales recientemente fue revocando.
“Vamos a a recuperar el tiempo, porque estamos con más equipos e intensificando nuestra acción, nuestro trabajo para recuperar lo perdido”.
El presidente no descartó nuevas acciones de las organizaciones que se oponen al Tren Maya, a las que, volvió a asegurar, financia el empresario y uno de sus opositores, Claudio X. González.
“Quién sabe con qué van a salir ahora, pero no van a poder detenernos. Y es también legal el que se utilice el amparo, y que haya oposición. Es normal. Y además entiendo que estén molestos y hasta les ofrezco una disculpa por las molestias que ocasiona el desterrar la corrupción de México. Les ofrezco disculpas”.
La Jornada