Pablo Mendizábal Bernal, el fiscal encargado de judicializar el caso de Jorge «N», despegó su carrera al interior de la Fiscalía de Veracruz en el periodo en que el ex fiscal estuvo al frente de la institución.

Mendizabal Bernal sólo había ejercido como Ministerio Público Municipal en Ixtaczoquitlán, y Agente Investigador en Xalapa, cuando en marzo del 2017, Jorge «N» lo nombró a fiscal en el Distrito Judicial de Orizaba.

En aquel comunicado donde se oficializaba su nombramiento y el de otros cuatro fiscales, destaca que mientras otros ostentaban cargos como maestros o doctores en derecho, y una serie de cargos dentro de la institución, Mendizabal Bernal sólo resaltaba su licenciatura en derecho y su experiencia de 12 años como abogado litigante.

En aquel nombramiento, Jorge «N» refrendó a Mendizabal Pérez y los otros cuatro fiscales “la plena confianza en su capacidad, preparación y al trabajo en equipo; así como en los grandes resultados que darán a los veracruzanos”.

Tras aquel nombramiento, Mendizábal Bernal llegó al distrito judicial de Orizaba, a sustituir a Clarisa Tapia Urias. Y unos meses después, fue transferido al distrito judicial de Tuxpan.

Ahora, Jorge «N» está en manos de Pablo Mendizábal, aunque en el círculo de abogados lo cuestionan, y consideran que este último debió excusarse de ser quién judicialice el caso contra su exjefe, por un evidente conflicto de intereses.

Pablo Mendizábal es hijo del médico forense Juan Pablo Mendizábal Pérez, quien saltó a la fama pública por realizar la primera necrocirugía al cadáver de Ernestina Ascensión Rosario, la indígena náhuatl fallecida en febrero de 2007, luego que presuntamente fue atacada sexualmente por elementos del Ejército Mexicano en la sierra de Zongolica.

En aquella necrociruguía el médico forense certificó que la indígena originaria de la comunidad de Tetlatzinga, municipio de Soledad Atzompa, sufrió muerte traumática y un ataque sexual. El crimen puso en jaque al entonces gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, y el presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, que en ese momento impulsaba la participación del ejército en tareas de seguridad pública.

Luego de tres años de investigación, la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) inhabilitó al médico forense Juan Pablo Mendizábal Pérez, a quien acusó de haber contaminado las muestras de líquido hemático del cadáver de Ascensión Rosario, y de certificar erróneamente que se encontró semen durante la autopsia.

Mendizábal Pérez impugnó su separación del cargo y anunció que recurrirá a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Su hijo, Pablo Mendizábal Bernal, fue quien asumió la defensa para revertir la inhabilitación.

Todavía en mayo de este 2022, el papá del fiscal del caso Winckler hacía peticiones públicas a la Fiscalía de Veracruz para ser reinstalado en su cargo.

Antecedentes

Jorge «N», abogado vinculado al ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, tomó protesta como Fiscal General del Estado el 31 de diciembre del 2016. De acuerdo con la legislación vigente, gozaría de autonomía en el cargo y su periodo duraría nueve años, de 2016 a 2025.

Durante el gobierno del panista Yunes Linares, Jorge «N» encabezó las investigaciones en contra de varios exfuncionarios del gobierno de Javier Duarte de Ochoa. Pero también se distinguió por confrontarse con familiares de personas desaparecidas, y por bloquear periodistas en redes sociales.

En campaña, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez se comprometió con familias de personas desaparecidas a que haría las gestiones pertinentes para destituirlo del cargo.

Y en septiembre del 2019, la Comisión Permanente del Congreso Local –ya durante el gobierno de Cuitláhuac García– lo separó de manera temporal del cargo, por no cumplir con el mandato constitucional de contar con certificación de confianza y su revalidación. Seis meses después, lo separó de forma definitiva.

De manera casi simultánea, el 23 de septiembre del 2019, un juez giró una orden de aprehensión contra Jorge «N» por el delito de privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro, que hoy lo tiene preso.

A punto de cumplir tres años profugo, el lunes 25 de julio, el ex fiscal de Veracruz en tiempos de Yunes Linares fue detenido en Puerto Escondido, Oaxaca. La detención fue realizada por elementos de la SEDENA, CNI y CONASE, de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.

Y la madrugada del martes 26 de junio, un juez de control impuso a Jorge «N» un año de prisión preventiva oficiosa como medida cautelar mientras es investigado dentro del proceso penal 296/2019, luego de que Francisco Zárate Aviña, jefe de escoltas de Luis Ángel Bravo Contreras, ex Fiscal General del Estado durante el gobierno de Javier Duarte, lo denunciara ante autoridades federales por el delito de privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro.

AVC

Conéctate con Formato7:

TEXTO Y CONTEXTO | Una fuerte advertencia de Cazarín