Conocer en estos tiempos a un servidor público con consciencia social es como encontrar una aguja en un pajar. Desde hace tiempo la política y la función pública se han distorsionado entre quienes se dedican a ella. Quienes llegan al poder lo hacen creyendo que la sociedad los encumbró por merecimientos distintos al compromiso que adquieren con ellos para atender sus necesidades: seguridad, salud, educación, crecimiento económico, así como la prestación de todos los servicios públicos necesarios para la supervivencia. El concepto es otro comenzando por usar el poder para enriquecerse y trepar a toda la familia para que participen de esa orgía de abusos en que convierten sus gobiernos. Sin embargo sí hay todavía quienes entienden con claridad el compromiso que adquieren cuando se proponen ocupar un cargo y lo alcanzan, como es el caso del alcalde de Xalapa Ricardo Ahued, quien desde que asumió el cargo se ha dedicado, las 24 horas del día, a atender reclamos ciudadanos y a tratar de componer el desastre que le heredaron en términos de rezago y corrupción. A manera de ejemplo les compartimos que hace unos días, con el fin de colaborar en la construcción de diversos proyectos a financiar con recursos federales, y a propuesta del alcalde Ricardo Ahued, las y los integrantes del Cabildo municipal de Xalapa aprobaron en Sesión Extraordinaria firmar un Convenio de Coordinación Específico con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu). De esta forma, a través de la «Vertiente Mejoramiento Integral de Barrios del Programa de Mejoramiento Urbano 2022», se apoyará la construcción del Centro de Desarrollo Comunitario con Atención a la Mujer y Centro de Desarrollo lnfantil (CADI), en la colonia Revolución; el parque urbano y Centro de Ecotecnias “Bosque Ferrocarrilero”, y la renovación de la Unidad Deportiva y construcción del Centro de Desarrollo Comunitario La Lagunilla, entre otras. Trabajo mata grilla, reza el sabio refrán popular.