Desde hace 10 años, la Facultad de Biología de la Universidad Veracruzana cuenta con una colección de lepidópteros, la cual resguarda aproximadamente a ocho mil especímenes, algunos de ellos de 30 años de antigüedad traídos desde Zongolica. Por lo que preparan la exposición itinerante “Artrópodos, 450 millones de años de evolución» como una forma de divulgar la ciencia y hablar de la importancia de estos insectos.
Un lepidóptero es un animal del tipo artrópodo que tiene el apéndice articulado. Los que están dentro de la clase insecta son aquellos invertebrados que se caracterizan por tener las alas cubiertas con escamas, como las mariposas diurnas o nocturnas (polillas) y de acuerdo con el portal Naturalista, los observadores han detectado mil 848 especies para Veracruz; en México se estima que hay 23 mil 750 especies, y cerca de 14 mil 500 descritas, según explicó el profesor de la Facultad Fernando Hernández Báez, responsable de la exposición.
Actualmente, la colección tiene en promedio unas 400 cajas entomológicas –de 40 por 60 centímetros–, alrededor de ocho mil especímenes y entre 800 y 900 especies de diversas partes, especialmente del estado de Veracruz.
Hernández Báez comentó que la colección derivó de la inquietud de los docentes y estudiantes por el manejo de colecciones biológicas y posteriormente obtuvieron el registro de colecciones científicas y museográficas de especímenes de especies silvestres que otorga la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
¿Por qué tener una colección entomológica?
Es una realidad que muchas especies de lepidópteros se han perdido, principalmente por la deforestación producto del crecimiento de la mancha urbana y la producción ganadera, entre otros factores. Ante esta situación, las colecciones entomológicas son de gran relevancia desde los puntos de vista científico, genético, educativo y económico; a través de ellas se mantiene parte de la riqueza y de la diversidad biológica de los insectos, al mantener la variedad de los especímenes.
“La pérdida del bosque ha pegado muy fuerte no sólo a la reducción de las poblaciones de mariposas, también de insectos en general y del resto de los grupos de fauna, que se han replegado a zonas más apartadas” y advirtió que en los últimos años las poblaciones de insectos han tenido reducciones importantes que han sido documentadas de manera científica, incluso “se habla del inicio de una nueva extinción masiva de insectos”.
Actualmente, compartió, trabajan en el fotografiado de cada uno de los especímenes para contar con una base de datos digital con todos los requisitos curatoriales (fecha de recolección, nombre del colector, características, etcétera). Esperan tenerla lista a finales de este año para su consulta en línea.
¿Qué requiere una colección así?
El investigador apuntó que sólo aceptan material biológico que ha sido colectado de manera legal, es decir, que la persona cuente con una licencia de colecta científica o con propósitos de enseñanza y, posteriormente detalló las condiciones especiales que requiere una colección de esta naturaleza, como cajas elaboradas de diferentes materiales para proteger las especies, un 50 por ciento de ellas son de cedro para evitar la descomposición del material biológico.
Además, también se requiere de un espacio con humedad muy baja (entre cuatro y cinco por ciento) o de preferencia que al interior de las cajas haya secantes y algunos otros reactivos para evitar la presencia de insectos que puedan acabar con ellas; además, las cajas se limpian con frecuencia, se rotulan y reetiquetan.
Fernando Hernández mencionó que durante los dos años que no asistieron a la entidad académica por la pandemia de COVID-19, las cajas entomológicas recibieron el mantenimiento correspondiente para prevenir daños por posibles desperfectos en el equipo, como el apagado de algunos refrigeradores.
“El costo de cada espécimen es realmente elevado: el gasto realizado para su recolección en campo, los alimentos de las personas, el transporte, el montaje en cajas entomológicas, el mantenimiento frecuente del material, los diversos insumos, entre otros.”
Por último, adelantó que están en el proceso de organizar la exposición Artrópodos, 450 millones de años de evolución, que será itinerante como una forma de divulgar la ciencia y hablar de la importancia de estos insectos.
AVC
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