Antonio Tenorio Muñoz-Cota, amigo entrañable de la vida y compañero de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM, quien ahora es Agregado Cultural en los Países Bajos, recientemente me dijo que en ese país no hay delitos. Todas las personas tenemos derecho a vivir sin violencia y a que el Estado proteja nuestras libertades, vidas, propiedades. Quizá uno de los indicadores más cruciales del desarrollo de una sociedad sea el de sentirnos casi totalmente libres de que otra persona nos pueda agredir, robar, lastimar.

En México estamos todavía muy lejos de esa posibilidad, pero de acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de Seguridad Pública (ENVIPE) 2021, en los últimos tres años nos vamos acercando a esa meta, y en especial en nuestro estado, que resulta muy bien posicionado de acuerdo a los resultados de la mayor herramienta nacional que existe para medir la inseguridad pública.

La ENVIPE la realiza el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) a través de una muestra nacional de 102,297 viviendas a nivel nacional, nacional urbano, nacional rural, entidad federativa y áreas metropolitanas de interés.

Entre sus objetivos está medir la victimización del hogar y personal durante 2020, estimar el número de víctimas durante 2020, y calcular el número de delitos ocurridos durante 2020.

Este año en general a nivel nacional se confirma un descenso constante de los delitos y de las víctimas en todo el país ya que la prevalencia delictiva tanto en hogares como en personas fue la más baja de los últimos ocho años. Así, se estima que hubo 30,601 delitos por cada 100 mil habitantes en 2020, lo que representa la tasa más baja en los últimos ocho años.

Y para Veracruz la ENVIPE arroja los mejores resultados, colocando a nuestro estado en las dos mejores posiciones a nivel nacional tanto en número de víctimas como en incidencia delictiva.

En cuanto a las víctimas por cada 100 mil habitantes por entidad federativa entre 2019 y 2020, Veracruz se mantiene estable con 14,602 víctimas en 2020 con relación a las 14,108 víctimas en 2019, siendo el segundo estado con menor número de víctimas en todo el país, estando muy por debajo de estados con tamaño similar de población como, por ejemplo: Puebla con 25,149 víctimas, Nuevo León con 23,313, Jalisco con 25,764 o la Ciudad de México con 33,344 víctimas en 2020.

Con ello, Veracruz se convierte en el segundo estado con menor tasa de víctimas del país después de Chiapas, con 14.6 víctimas por cada 100 mil habitantes, siendo la media nacional de 23.5 por cada 100 mil habitantes.

Desglosado por área urbana o rural de nuestro estado, de 2019 a 2020 el número de víctimas en el área urbana disminuyó de 18.7 a 18.2 por cada 100 mil habitantes y en el área rural disminuyó de 8.7 a 6.3 víctimas por cada 100 mil habitantes.

El INEGI estima que 18.5% de los hogares en Veracruz tuvo al menos una víctima, mientras que esa tasa a nivel nacional es de 28.4 %, es decir, 10% menos que la media nacional.

En cuanto a la tasa de víctimas, la de 2020 es la tasa más baja en los últimos ocho años en Veracruz.

Por lo que respecta a delitos, en la entidad veracruzana la tasa de delitos disminuyó de 19,542 por cada 100 mil habitantes en 2019 a 18,778 en 2020, siendo el segundo estado con menor tasa de delitos a nivel nacional.

En el dominio urbano la tasa de delitos por cada 100 mil habitantes disminuyó de 26,101 delitos en 2019 a 23,163 en 2020, aunque aumentó en el dominio rural con una tasa de 8,485 delitos en 2019 a 11,534 en 2020.

Uno de los datos que me pareció muy interesante y que seguramente servirá para la toma de decisiones de política pública en seguridad pública es el del número de delincuentes en los delitos donde la víctima estuvo presente, esta tasa aumentó en Veracruz, ya que para el año 2020 el porcentaje de delitos donde hubo 3 o más delincuentes fue de 17.2% en comparación con los años anteriores: 2019 fue de 12.9%, 2018 fue de 13.6%, 2017 de 11.2%. Ello significa que las bandas están creciendo en nuestro estado.

Igualmente me parece que es dingo de estudio y análisis el dato de que está aumentando la participación de mujeres en la comisión de delitos ya que pasó de 6.3% en 2015, 2.9% en 2017, 5.9% en 2019 a 7.9% en 2020.

Lo más paradójico es que la ENVIPE, que también mide la percepción de la seguridad pública (pero que en esta ocasión no desgloso aquí ya que recientemente lo hice con los resultados de la ENSU), señala que en Veracruz la percepción de inseguridad (de 82.6%) no corresponde con estos cálculos o estimaciones, ya que las y los encuestados siguen percibiendo que existe inseguridad colocando a nuestro estado unos peldaños arriba de la media nacional (de 78.6%), aunque no en los peores lugares.

No obstante ello, de 2019 a 2020 la percepción sobre inseguridad disminuyó en Veracruz, pasando de 86.1% en 2019 a 82.6% en 2020.

Finalmente, en cuanto al nivel de confianza en el desempeño de los cuerpos e instituciones de seguridad pública, tanto a nivel nacional como en Veracruz, sigue apareciendo que las policías municipales y las policías de tránsito tienen la peor calificación ciudadana en percepción de confianza entre todas las autoridades. Para nuestro estado, el 49% de la población desconfía de las policías municipales y el 63% de las policías de tránsito. Esto nos habla de una evaluación profunda y un trabajo muy fuerte y pendiente en la profesionalización y capacitación, así como en el fortalecimiento de estos cuerpos de seguridad.

Los invito a que consulten la ENVIE 2021*, que fue presentada este 22 de septiembre. Desde luego estas no son buenas noticias para la oposición, quedando sin argumentos frente a la estrategia nacional de seguridad del Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Y resulta justo reconocer y felicitar el trabajo del Gobernador Cuitláhuac García Jiménez y de la Mesa Estatal para la Construcción de la Paz y la Seguridad, porque me consta que no han parado de reunirse ningún día de toda su gestión, recorriendo todo el estado, municipios y localidades a lo largo y ancho de Veracruz, con operativos, estrategias y planes focalizados en los lugares donde aparecen los focos rojos delictivos.

Estos resultados ahora se ven en la ENVIPE, así como en los reportes de incidencia delictiva del Sistema Nacional de Seguridad Pública, aunque lejos estamos todavía de vivir en sociedades como la holandesa donde está mi amigo Toño representando dignamente a nuestro país.

https://www.inegi.org.mx/programas/envipe/2021/