Con respeto y reconocimiento a las cuadrillas del Ayuntamiento de Xalapa,
a quienes ensucian los zapatos diario, sin los privilegios de la oficina.
No podíamos esperar del gobierno municipal de Xalapa una reacción incorrecta ante el impacto del huracán Grace en la ciudad, al frente del Ayuntamiento tenemos el lujo de que esté un Doctor en Ciencias Sociales, especialista en temas de desarrollo sustentable y medio ambiente, coordinador de proyectos relacionados al ordenamiento territorial, un profesor-investigador interesado en tópicos como los procesos urbanos, ciudades y los anteriormente mencionados.
Nada podía salir mal ante la inminente llegada de un fenómeno meteorológico. Grace, en su trayectoria de impacto sobre costas veracruzanas, aunque no de manera frontal, siempre estuvo sobre Xalapa; los modelos también avisaban acerca de su crecimiento, al menos a categoría 2. En la capital veracruzana no estábamos por primera vez frente a un hecho de esa magnitud, siempre la temporada de lluvias nos recuerda cuáles son las zonas donde las inundaciones afectan a la población, dónde hay peligro de deslaves, esos focos rojos están registrados en un Atlas de Riesgos municipal.
Llegó Grace a la ciudad y nos dio un baño de realidad, las muertes no se presentaron en la zona de impacto directo, se dieron en una ciudad alejada cientos de kilómetros de la zona norte de Veracruz; y no son esas muertes la razón de tanta crítica a los “expertos” del gobierno municipal xalapeño, es la explícita ausencia de prevención, a menos que nos demuestren que hayan visitado las casas de zonas de alto riesgo, para invitar a la ciudadanía para desalojar las zonas, ofrecerles refugio previo al impacto y no después de lo que ya hemos atestiguado.
¿De qué ha servido tener una Dirección de Protección Civil? Ya con la prueba que ha resultado la pandemia hemos visto los cortos alcances, el personal parece poco y está bajo las órdenes de un constructor y un administrador; si acaso se salva el Jefe de Monitoreo y Atención de desastres por su amplio currículim en el ámbito, incluso por ello él debería estar al frente de la dirección; pero en un gobierno municipal en el que cualquiera pudo ser presidente, pues cualquiera puede tener una dirección. Si no hay experiencia en campo, la especialización en el aula no es suficiente; y cuando eso pasa en el servicio público cuesta dinero y, a veces, vidas o pérdidas materiales.
Con actualización al 30 de junio del 2021, en el sitio web de transparencia del Ayuntamiento de Xalapa, encontramos razones para entender el enfoque que las autoridades locales han dado a la emergencia
(https://drive.google.com/file/d/1QLeP6seXJoitUqm2fo_tnbP0l63Wqc1u/view). José de Jesús Vargas Hernández, Director de Protección Civil municipal, es licenciado en arquitectura por la UV, su traycetoria profesional es únicamente de 5 experiencias laborales, la mayoría en la iniciativa privada en el ramo de la construcción y como consultor, solamente 1 año había estado en el servicio público como encargado de mantenimiento del hospital Luis F. Nachón; su papel en la construcción está vigente, pues en su ficha curricular se menciona que es Coordinador Operativo y de Seguridad de la empresa CAVSA CONCRETOS.
El “jefe” Vargas apenas tiene 2 seminarios y un curso como parte de su formación en protección civil, enfocados a la respuesta ante emergencias con materiales peligrosos, drogas básicas e investigación criminal, y uno que parece haberlo tomado nadamás por el papelito y que lo “preparó” para conocer las medidas de mitigación de riesgos en asentamientos irregulares, justo lo que debió aplicar antes de la llegada del Huracán Grace.
Pero el director no opera solo, la sociedad xalapeña cuenta con un Jefe del Departamento de Prevención de Riesgos, de la misma dirección de Protección Civil, se trata de Fernando Romero Rivera, un experto en la alta dirección, el control de calidad y pasante de la maestría en administración pública y gobierno, por la escuela libre de derecho. Todos los datos pueden verificarse en su ficha curricular pública (https://drive.google.com/file/d/1H_no7fk28KIFPqSYLinJq4VnAdJYsdyC/view).
A diferencia del “jefe” Vargas, el Maestro Romero si tiene amplia experiencia el ámbito gubernamental, es un lujo que sea el encargado de cuidar a la ciudad ante inminentes riesgos por desastres naturales o emergencias; Fernando fue subdirector administrativo de la oficina de representación del Gobierno de Veracruz en la Ciudad de México cuando Fidel Herrera era gobernador, luego fue subdirector administrativo de la Coordinación General de Comunicación Social de la Secretaria de Medio Ambiente, del gobierno de la CDMX entre 2014 y 2016; y como alta especialización en protección civil, fue analista administrativo de la oficina de relaciones públicas del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. Romero Rivera no cuenta con cursos ni seminarios de actualización en su ámbito de trabajo actual, al menos eso se puede encontrar en el documento público consultado y actualizado.
¿Confiaría usted su salud en un médico sin experiencia? En Xalapa depositamos la confianza en un proyecto subido en la ola Lopezobradorista, que se ha plagado de improvisaciones, insensible, omiso. Antes de ahogado el niño hay que tapar el pozo, no caben los graciosos pretextos de “es que los gobiernos anteriores”, tiene la información en un documento como el Atlas de Riesgos, tienen el registro de los estragos de la lluvia en la ciudad, tienen los recursos y la responsabilidad para hacer su trabajo a la altura de quienes votaron por su alcalde.
Ya me imagino al personal operativo de PC Xalapa, dándose de topes con sus jefes; hoy Xalapa también los sufre y les recordamos que tomar una responsabilidad en el servicio público para la que no se está preparado también es corrupción.