En Xalapa, donde Morena ganó primero en 2015 la diputación federal con Cuitláhuac García y luego, en 2017, la alcaldía con Hipólito Rodríguez Herrero, el partido del presidente López Obrador estaría por perder una curul del Congreso de la Unión, cuyo control es lo que realmente interesaría más al mandatario mexicano.

Hasta ahora nadie entiende cómo es que en el décimo distrito electoral federal, conocido como Xalapa Urbano, Morena postuló candidatos comunes en coalición con el PT y el PVEM para la alcaldía y el Congreso local pero no para la diputación federal.

Y no sólo eso, sino que en vez de nominar a Carlos Abreu –un popular empresario xalapeño más afín al perfil del candidato a la alcaldía Ricardo Ahued, el cual, al no formalizarse la alianza tuvo que acceder a contender por el PT, un partido sin presencia ni estructura sólida en Xalapa–, la cúpula nacional de Morena decidió que el actual diputado federal Rafael Hernández Villalpando se reeligiera, no obstante que desde que ganó la elección de 2018 gracias al llamado “efecto López Obrador” el electorado xalapeño no volvió a saber de él, hasta ahora que regresó a solicitarles nuevamente su voto.

Al cuestionársele su ausencia y nula gestoría como diputado en apoyo de los xalapeños, Hernández Villalpando –quien como alcalde no concluyó su periodo municipal, ya que en septiembre de 2000 fue desaforado por el delito de bigamia luego de haber ordenado que dos camiones del servicio de Limpia Pública arrojaran toneladas de basura frente a Palacio de Gobierno en represalia porque la administración alemanista había clausurado por contaminante el relleno sanitario de “El Atorón”, un predio ubicado en los límites con Coatepec–, ha presumido su amplia experiencia política utilizando una desafortunada expresión que sus detractores han aprovechado para hacer escarnio de él en las redes sociales, al motejarlo como “Lord Paleta Chupada”.

“Yo soy paleta chupada, muy chupada. La gente me conoce, la gente me conoce, las mujeres me conocen y las niñas. He sido de los alcaldes que más desayunos escolares dieron, casi 20 mil diarios”, dijo sobre su administración municipal de hace casi 21 años.

Por eso, a Hernández Villalpando, así como a las candidatas a diputadas locales Ana Miriam Ferráez y Rosalinda Galindo, no se les ha vuelto a ver que hagan campaña junto con Ricardo Ahued, mejor posicionado en la contienda por la alcaldía. Según trascendió, son tantos los negativos que arrastran los abanderados de Morena a legisladores que habrían recibido la instrucción de que cada quien realizara proselitismo por separado.

De acuerdo con la plataforma mivotoutil.mx –creada para votar “de forma razonada” y “lograr un equilibrio en la Cámara de Diputados”, impulsando principalmente a candidatos del bloque opositor PAN-PRI-PRD–, la consultora Massive Caller, en su última encuesta del 12 de mayo, colocaba ya con un margen menor de 2 puntos porcentuales al priista Américo Zúñiga (42%) por encima de Hernández Villalpando (40.7%), cuyo partido, Morena, encabezaba las preferencias electorales al inicio de la campaña.

‘EL REY HA MUERTO… ¡VIVA EL REY!’

Con el fallo unánime de los tres magistrados de la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que confirmó la inelegibilidad del panista Miguel Ángel Yunes Márquez como candidato a la alcaldía del puerto de Veracruz, el desánimo comenzó a cundir en el búnker del ex alcalde de Boca del Río, aunque la candidata sustituta Patricia Lobeira ha tratado de reanimar a los seguidores de su esposo.

Yunes Márquez todavía podría recurrir a la Sala Superior del TEPJF, pero prácticamente le será imposible revertir el fallo del Tribunal Electoral del Estado que ahora, a una semana de que concluyan las campañas, ha ratificado la Sala Regional Xalapa del Tribunal Federal.

El fallido ex candidato a gobernador ya no puede seguir culpando a los magistrados “corruptos” de su desgracia electoral.

Pero ahora, lo que al parecer más le preocupa, según cuentan algunos de sus allegados, es que ante el fallo adverso que no se esperaba del Tribunal Federal, Yunes Márquez comienza a dudar si realmente su esposa Paty Lobeira logrará cumplir con las expectativas de alzarse con el triunfo en los comicios del 6 de junio próximo.

Otro problema que enfrenta es que ya sólo falta una semana de campaña, lo que muy difícilmente le alcanzaría para sustituirla y posicionar entre el electorado a alguno de sus amigos incondicionales.

Este resultado ha empezado a generar incertidumbre y desánimo a los seguidores e integrantes del equipo cercano, tan es así que algunos de ellos ya empezaron a saltar del barco como las ratas.

Se sabe de buena fuente que varios yunistas de hueso azul, de esos que se rasgan las vestiduras y se cortan las venas con hojas de lechuga, ya buscan tener contacto con el equipo de Ricardo Exsome, el candidato de Morena, a quien le ofrecen información interna para enterrar el último clavo al ataúd político del Clan Yunista.

“El Rey ha muerto… ¡viva el Rey!”.

LES INDIGESTA EL ‘CHOCOLATE’

A escasos siete días de que concluyan las campañas, las fuerzas oscuras se han desatado en la capital veracruzana, ya que mediante amenazas pretenden descarrilar a los candidatos que vienen de atrás creciendo notablemente en la contienda por la alcaldía de Xalapa.

Según nos comentan, hace apenas unos días el empresario José “Pepe” Kuri se sumó al equipo de José Alberto Pérez Fuentes “Chocolate” y públicamente dijo aspirar a la Dirección Municipal de Turismo si el candidato del PES logra ganar la elección.

Como el candidato ciudadano, nativo del popular barrio xalapeño de El Dique, avanza viento en popa rumbo al 6 de junio y ha ido creciendo sorpresivamente en las preferencias electorales –tal como lo revelan varias encuestas–, de repente los demonios se desencadenaron, pues según trascendió de manera extraoficial, Pepe Kuri comenzó a recibir desde amenazas de boicot a su negocio hasta presuntas insinuaciones de que podrían atentar contra él o su familia.

Cobardes y ruines, no se les puede llamar de otra forma, pero bien dice el viejo refrán popular que “perro que ladra, no muerde”. Y como le atribuyen al Quijote de Miguel de Cervantes Saavedra: “si los perros ladran, señal de que vamos cabalgando”.
¡¡Ay nanita!!, van a salir chispas de esta contienda municipal. Pero lo que no se esperaban los adversarios, es que este “Chocolate” les saliera muy espeso y espumoso.

TOÑO LUNA SE DESPEGA

El que está gastando suela en serio, caminando incansablemente por los nueve municipios del XIII distrito electoral local con cabecera en Emiliano Zapata, es el candidato de la alianza “Juntos Haremos Historia” (Morena-PT-PVEM), Luis Antonio Luna Rosales, quien además está echando mano de sus mejores recursos políticos para hacer amarres con líderes regionales y grupos sociales, sindicales, de productores y empresariales.

Hace una semana, por ejemplo, se sumó a su campaña Jordan Borjas Cueto, candidato a diputado local del partido Fuerza por México, mientras que miembros del Sindicato Unificador de los Trabajadores al Servicio del Estado y del Magisterio (SUTSEM), de Ricardo Diz Herlindo, se adhirieron públicamente a su candidatura.

Estas y otras sumas, obviamente, comienzan a reflejarse en las tendencias electorales. El
Instituto de Opinión Pública S.C, por ejemplo, realizó un estudio demoscópico en los 9 municipios del Distrito XIII con la técnica de entrevista directa cara a cara a 1,500 ciudadanos con credencial de elector vigente. El nivel de confianza y asertividad es de 91% y el margen de error estadístico es +/- 4%.

En esta encuesta, Luis Antonio Luna Rosales, de la coalición “Juntos Haremos Historia” (Morena-PT-PVEM), figura con 32% de las preferencias; Leonel Segundo Grajales, de la alianza “Veracruz Va” (PRI-PAN-PRD) aparece con 21%; David Cerero de la Cruz, de Redes Sociales Progresistas, con 11%, y Ruth Callejas Roldán, de Movimiento Ciudadano se acerca con 9%. Otros participantes suman en total 5%.

Pero lo interesante de este estudio demoscópico es que todavía hay un 22% de indecisos, que “no sabe” o “no contestó”.