Desde hace un mes en el Centro Estatal de Cancerología “Miguel Dorantes Mesa” hay desabasto de medicamentos oncológicos y las autoridades se excusan al decir que se acabó el lote que llegó en meses anteriores.

Madres y padres de familia de pacientes menores de edad denunciaron que faltan medicamentos como metotrexato, L-asparaginasa, Vincristina, Etopósido e Hidrocortisona, pero también escasean insumos básicos como soluciones simples, e incluso el material para las vías intravenosas son de mala calidad.

“Son cosas básicas, incluso el equipo que mandan de enfermería ya es muy sencillo, ya no es de calidad, hasta los mismos enfermeros dicen que el hospital va cada vez de mal en peor por las cosas que mandan; las mangueras y demás son corrientes y en ocasiones se salen y es un riesgo de infección para quienes tienen catéter”, indicó una de las madres de familia que prefirió el anonimato.

Señaló que la situación comenzó a agudizarse hace un mes y que las autoridades señalan que no hay desabasto, pues aceptan que se trata de una mala planeación en la solicitud de insumos, por lo que dijo que es urgente que haya “

“Con el desabasto me ha tocado que vengo por surtir una receta y me dicen que no hay, pero si voy y hago show me dicen que casualmente sí hay unas piezas, si me muevo sí hay, si no me muevo no hay y luego dicen que no hay fecha para que llegue. Hace 15 días no había metotrexato pero que no era desabasto nacional, sino que se habían terminado las piezas del mes y estaban gestionando las del próximo mes, pero ellos ya saben cuántas se requieren”.

Otro padre de familia señaló que pareciera que el desabasto es igual al que ocurrió en diciembre de otros años, por lo que cuestionó las razones de que durante este primer semestre la situación sea cada vez peor.

“¿Por qué pasa esto en esta temporada? No sé si es porque son tiempos electorales o a qué se argumente este tipo de situaciones (…) Desde hace un mes es constante, si no falta uno falta otro medicamento”.

Los padres de familia advirtieron que su mayor temor es que este desabasto impacta en los tratamientos de los menores de edad, lo que significa ponerlos en riesgo de una recaída ante el cáncer que padecen.

“Es a lo que nadie quiere llegar porque es como si el cáncer volviera como la primera vez que llegamos al hospital, como si el niño no hubiera recibido el tratamiento en tiempo y forma y es lo que provoca la recaída”.

AVC/Perla Sandoval

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