Con eso de que el “sospechosismo” está a todo lo que da entre los morenistas y sus aliados ante la ríspida contienda electoral, sólo falta que las recientes explosiones ocurridas en la refinería de Minatitlán y en el complejo petroquímico de Pajaritos, de Coatzacoalcos, se los vayan a adjudicar otra vez a la CIA y a “la derecha, acostumbrada a hacer ‘cosas repugnantes’”, tal como publicó en Twitter el productor de televisión Epigmenio Ibarra tras el escándalo generado hace tres semanas por una enfermera que simuló haber aplicado la vacuna anti-Covid a un adulto mayor en la Ciudad de México.

Y es que como cabeza de sector, por sus aspiraciones a la gubernatura de Veracruz y por tratarse de su feudo político en el sur de la entidad, la titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle, resulta afectada directamente por estos siniestros ocurridos en las instalaciones de Pemex en solo 13 días.

Recuérdese que el 6 de junio del año pasado, al encabezar la supervisión de los trabajos de rehabilitación del Sistema Nacional de Refinación en la Refinería “General Lázaro Cárdenas” de Minatitlán, el presidente Andrés Manuel López Obrador destacó casualmente la participación de Nahle García, quien estaba acompañada del director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza y del director general de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett.

Pero casi diez meses después de esa visita presidencial, el pasado 7 de abril, una fuga de combustible en uno de los tanques de gasolina provocó un incendio que mantendrá paralizada durante 90 días las operaciones de esta planta refinadora.

Hace dos años, el 27 de abril de 2019, López Obrador había visitado también esta misma refinería. En esa ocasión anunció una inversión de dos mil millones de pesos. “Ya se están haciendo las compras de refacciones, de equipos, de herramientas”, dijo.

Además presumió que “van a ser los trabajadores, los técnicos petroleros mexicanos los encargados de la rehabilitación, trabajadores de planta y transitorios en activo y también con trabajadores jubilados, porque vamos a utilizar la experiencia de quienes todavía tienen mucho que aportar para el rescate de la industria petrolera”.

“Para eso fue esta visita”, remarcó entonces el Presidente. Pero en una carta que hace dos semanas, tras la explosión en la refinería de Minatitlán, un Técnico “A” Instrumentista envió al director de Pemex, el trabajador activo recriminó “la necedad del bloqueo de plazas y la falta de coberturas de las mismas, quitándole la oportunidad de trabajar a los compañeros transitorios, compañeros de operación doblando turnos de 32 horas y falta de personal de mantenimiento.”

“Aunado a la falta de estrategia de mantenimiento y la negativa de la autorización de refacciones y pagos de tiempo extra e insalubre”, acusó, señalando que el incendio puso “en riesgo no solo la refinería sino parte de la ciudad” de Minatitlán.

“Pero déjeme decirle que esa política de ahorro en esta ocasión le costará alrededor de 50 millones de dólares”, expuso el trabajador petrolero en su carta enviada a Romero Oropeza mediante el correo electrónico jsaguirre@nullhotmail.com.

LA FUERZA DE NAHLE

Por cierto, hablando de la secretaria de Energía, Rocío Nahle, nos dicen que la fuerza política de la senadora con licencia y aspirante a la gubernatura de Veracruz en 2024 se hizo sentir en la reciente designación de los candidatos de Morena a las principales alcaldías del estado.

En Poza Rica, por ejemplo, el famoso ex beisbolista Fernando “El Pulpo” Remes, amigo del presidente López Obrador, se negaba a contender por la diputación federal porque estaba encaprichado en ser el abanderado a la presidencia municipal. Sin embargo, por más que le fajó al tabasqueño, el ex jugador de Los Tigres capitalinos no pudo salirse con la suya debido a que la ingeniera química oriunda de Zacatecas y avecindada en Coatzacoalcos terminó imponiendo a su amiga y aliada Raquel Bonilla Herrera, actual legisladora federal pozarricense.

Y en Coatzacoalcos no solamente impuso al diputado local Amado Cruz Malpica por Morena sino también al ex priista Víctor Rodríguez Gallegos, quien será postulado a esa alcaldía porteña por el PVEM.

Según nos cuentan, es tanta su influencia sobre el llamado “Negro que no se raja”, que le modificó toda la planilla que Rodríguez Gallegos había armado con el visto bueno de su ex jefe político Marcelo Montiel Montiel, el popular ex alcalde y ex diputado de Coatzacoalcos a quien Nahle parece seguir repudiando “con odio jarocho” nada más porque el hijo pródigo de Naranjos, municipio de Puente Nacional, la hizo morder el polvo como candidata del PRD.

Así que todos aquellos que tienen facturas políticas pendientes con doña Rocío deberían ir tomando precauciones por si acaso la señora cumple su anhelo de sustituir al gobernador Cuitláhuac García dentro de tres años.

Incluyendo al diputado Juan Javier Gómez Cazarín, presidente de la Junta de Coordinación Política de la LXV Legislatura local, pues trascendió que hasta las oficinas de la Secretaría de Energía en la Ciudad de México llevaron recientemente una grabación donde se escucha a un cercano colaborador del líder del grupo legislativo de Morena decir una serie de sandeces que al parecer pusieron de muy mal humor a la señora Nahle.

¿Pues qué tanto se habrá ido de la boca el subordinado del hijo predilecto de Hueyapan de Ocampo?