Adderesound, ya lo he comentado, más que un grupo musical es un laboratorio de experimentación en el que, a partir de elementos sónicos, rítmicos y estilísticos muy diversos que tienen que ver con el largo viaje personal que ha hecho Rudyck Vidal por los caminos de la música, se genera una música absolutamente original. El proyecto inició aquí en Xalapa y en la formación inicial estaban Rudyck Vidal en el bajo, los arreglos, la composición y la dirección, Nissiel Ceballos en la trompeta, Paquito Cruz en el piano, Jesús Rodríguez Alarcón en la batería y Teté Espinoza en la voz, a la que se sumaba Marilyn Castillo cuando estaba en Xalapa. Por supuesto que, como en toda agrupación, el sonido se construye con la suma de las individualidades, pero Adderesound es, sobre todo, Rudyck Vidal, hace unos años me comentó que una de sus primeras tocadas fue en el Cessac por invitación de Guillermo Cuevas, al terminar la presentación, una persona del público, desconcertada por lo que había escuchado, dijo:

«—¿Por qué están tocando eso?, eso no es jazz.

«—¿Qué es jazz para usted?, —le pregunté.

«—Jazz es Duke Ellington, jazz es Miles Davis.

«Efectivamente, lo que tocamos no es jazz. Yo ya toqué a Duke Ellington, yo ya toqué a Miles Davis, yo ya toqué a Clifford Brown, pero ahora estoy tocando a Rudyck Vidal y Rudyck Vidal es esto».

Cuando se fue a Nueva York, echó mano de los músicos latinos que andan por allá para continuar el proyecto y con ellos ha hecho varias versiones del grupo, en diferentes momentos han estado Alex Tosca en el piano, Alejandro Flores en la guitarra, Cristian Mendoza y Jeremy Powell en el saxofón, Nash Guillermo en la trompeta, Amaury Acosta y Juan Felipe Mayorga en la batería, Felipe Fournier en el cajón, Guillermo Barrón en las percusiones, Marilyn Castillo en la voz, y varios más.

Recientemente reunió una nueva dotación de músicos para grabar un disco que pronto saldrá a la luz con el nombre Inventándote, como anticipo ha publicado el video de Niña de los Astros, un pieza en la que, fiel a su estilo, parte del son jarocho tradicional y lo va trastocando hasta llegar a un sonido que resonaba en su cabeza, el que produciría un ensamble formado por Los Vega o Son de Madera y la banda eléctrica del recién fallecido, y ya muy extrañado, Chick Corea.

«Técnicamente —me comentó hace unos días—, lo que hice fue combinar son jarocho con jazz y con rock. Hay dos partes en la canción, una que suena súper folclórica y para la otra, yo imaginaba que esto tenía que sonar como si un grupo de son jarocho estuviera tocando con la Elektric Band de Chick Corea, y parece que sí se logró; esos son los sonidos que quise presentar en este nuevo video. Este tema está recargado en el son jarocho, van a salir otros temas enfocados a las cosas guerrerenses, al mariachi, a la música norteña, todo con la fusión que siempre utiliza Adderesound, que es lo que yo conozco pues yo soy el que lo dirige y el que decide qué parte es jazz, qué parte es rock, qué parte es latino. En esta canción, yo estoy cantando como voz principal y va haber más canciones en las que yo sea la voz principal».

La letra letra tiene una historia peculiar, la hizo a partir de «una experiencia fuerte que tuvo mi hermana en la que casi se nos va, pero no pasó, afortunadamente. En el video se ve a una muchacha —que es mi hermana— que está asistiendo a su propio funeral, va caminando tratando de ver qué hay en el ataúd, que está cerrado, mientras la muerte la va siguiendo y la está acechando. Yo voy cantando y le voy diciendo que lo natural es que, si yo soy mayor, ella me tiene que enterrar a mí, no yo a ella. Al final se descubre que lo que va en el ataúd es mi bajo, no pasó nada y el funeral acaba en una fiesta. No se murió nadie, pero es una llamada de atención para decir que hay que estar pendientes y que hay que gozar la vida porque no la tenemos comprada».

Dicho lo cual, dejo el video y me retiro lentamente para que lo disfruten sin interrupción alguna.

 

 

 

 

 

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