Ya se ha comentado que a pesar de su frágil estado de salud, el ex gobernador Fidel Berrera Beltrán no deja de estar atento a la actividad política de su entidad natal.

Inclusive hay quienes aseguran que como el caballero castellano Rodrigo Díaz de Vivar, el legendario Cid Campeador, pese a su postración intentará ganar pese algunas batallas municipales y distritales en los comicios locales y federales del año entrante.

La semana antepasada, por lo mientras, reapareció en redes sociales acompañado de Daniel Lugo Carrasco, un desacreditado ex funcionario de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) y de Diconsa, que hasta marzo de este año enfrentaba un litigio por pensión alimenticia en el Juzgado Octavo de Primera Instancia, Familiar, según el expediente número 1793/2015.

No obstante, el ex mandatario veracruzano aparece muy sonriente con Lugo Carrasco, quien insertó el mensaje “Veracruz late con fuerza”, el eslogan de la administración fidelista.

A su vez, su esposa Rosa Borunda de Herrera anda también muy activa, promoviendo abiertamente en su cuenta de Twitter a Carlos Aceves Amezcua para la presidencia municipal de Xalapa.

Hace tres días, en respuesta a una columna política que René del Valle escribió titulada “Alcaldesas de Xalapa y sus candidatas” –en la que el periodista mencionó a las ex munícipes interinas y a la priista Elízabeth Morales, la única que llegó a la alcaldía mediante voto directo, así como a las aspirantes más mencionadas, principalmente a las diputadas Rosalinda Galindo, Ana Miriam Ferráez y Dorheny García Cayetano, de Morena–, la señora Borunda tuiteó el sábado anterior: “Qué bueno que las mujeres estén ganando espacio espacios en Veracruz! Creo que Carlos Aceves en esta ocasión es el mejor preparado, además de ser honesto, fiel y tiene una muy bonita familia! Como mujer yo votaría por @SoyCarlosAceves.”

Y días antes, al agradecer un comentario del columnista Quirino Moreno, doña Rosa había elogiado también al ex director del COBAEV, remarcando inclusive que había tenido “buena escuela”, en alusión, obviamente, a que el sobrino del dirigente nacional de la CTM, Carlos Aceves del Olmo, había colaborado con la esposa de Herrera Beltrán en el área jurídica del DIF Estatal.

Aceves Amezcua, en efecto, fue de los pocos que lograron salir inmunes del estigma de la corrupción que marcó a otros fidelistas que en su momento mantuvieron una gran cercanía también con doña Rosa, entre ellos Javier Duarte y Karime Macías Tubilla, uno actualmente preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México por los delitos de asociación delictuosa y lavado de dinero, y la otra exiliada desde hace casi tres años en Londres, donde en noviembre próximo la justicia británica determinará si es extraditada a su país para que enfrente el proceso penal por un presunto desvío de más de 100 millones de pesos en el DIF Veracruz que le imputan las fiscalías de la República y del Estado.

Otro ex colaborador de doña Rosa en el DIF Estatal fue el boqueño Juan Felipe Ruiz Sosa, de la Constructora RUSO, quien ha sido implicado en el caso Lozoya, pues presuntamente el ex director de Pemex recién extraditado de España por la FGR, lo habría vinculado con directivos del consorcio brasileño Odebrecht para financiar la campaña de Duarte de Ochoa en 2010.

Fidel Herrera y su esposa impulsan a Aceves Amezcua por el PRI, pero resulta que su hijo Javier Herrera Borunda es uno de los delegados nacionales en Veracruz del Partido Verde que en las próximas elecciones pretende ir aliado con Morena. ¿Entonces…?