¿Seguirá vigente la frase «Televisa te idiotiza»?

El entorno en el que hoy vivimos, adaptándonos todavía a la presencia del virus SarsCov2, es extraordinario, único en la historia por el momento económico en el que llegó, por la coyuntura política que algunos países viven, especialmente México. La vida, en general, es diferente en aspectos que nunca imaginamos podrían ser tan importantes para nosotros, la falta de socialización afecta diariamente a chicos y grandes, la economía en picada hace que el miedo y la incertidumbre golpeen constantemente en la cabeza de miles de mexicanas y mexicanos.

La vida educativa, además de la económica, es una de las peor afectadas en el mundo; cada país con sus particularidades. En Veracruz, el coloquialmente conocido Covi, pegó a las escuelas pasado medio curso, desde preescolar hasta universidad el fregadazo fue contundente. Desde aquel mes de marzo las preguntas y los reclamos comenzaron, los especialistas en pedagogía salieron de todos lados.

La emergencia sanitaria, convertida en pedagógica, recordó a la sociedad y al gobierno que hay una gran cantidad de población sin acceso a internet, es más, ni cuentan con una tele. Por otro lado, puso al descubierto una carencia de capacitación en un amplio sector del magisterio, que no está preparado para usar las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, cuestión de la que no solamente ellos son responsables, pues hay una autoridad estatal y federal que podría haberse ocupado antes por poner a las y los maestros en sintonía con la vida digital, ese entorno en el que su alumnado vive diariamente porque son nativos digitales.

Cambiaron las aulas por las cámaras web, por los programas de televisión y los espacios en radio; algo que no es novedad en México, incluso Veracruz es pionero de la educación a distancia gracias a las clases televisadas que se produjeron hace décadas desde el Cerro de la Galaxia, lo que dió pié a fundar el canal 4 Mas, hoy RTV.

Quienes por fortuna, pueden pagar una colegiatura en una escuela particular, puden acceder a un esquema online con las mismas maestras y maestros de sus hijas e hijos toman clase diariamente, pero la comunidad educativa del sector público ha vivido días de incógnitas. Que si las boletas, que si las tareas, que si la carpeta de evidencias, que cómo van a evaluar; un sin fin de preguntas que han circulado en redes sociales, las cuales son respondidas irresponsablemente por pseudoespecialistas que únicamente hacían leña del árbol caído politizando un tema tan honorable como la educación pública.

Pocos, hasta donde un servidor ha monitoreado, le han dado un reconocimiento al gremio magisterial y las pocas autoridades educativas que no dejaron a un lado el enorme compromiso de la educación pública; a marchas forzadas se trató de no dejar a las y los niños, además de jóvenes sin una opción de seguimiento a su plan educativo. Si, hay que reconocerlo, en un nuevo entorno se saturó a niñas y niños de actividades, no se pensó que algunos estaban solos en casa mientras sus madres o padres debían salir a buscar ingresos; esos temas deben ser hoy contemplados por la SEP, si es que la lección se aprendió.

Obviamente, una clase televisada no sustituirá lo que se hace en el aula, mucho menos una clase por radio; pero es lo que hay, es a lo que obliga la situación histórica que vivimos y eso poco se menciona. Ahora, imaginemos que las autoridades dijeran que el sistema educativo se suspende hasta poder regresar al aula porque la tele, el internet y la radio ni sirven ni están en todos lados, peor tantito. Entonces ¿qué queremos?

Igual que la sociedad ha mostrado empatía por el gremio médico mexicano, hoy es momento de que se sumen iniciativas al proyecto educativo nacional; es bien fácil criticar cualquier decisión y no aportar ideas, dar opciones; ¿dónde están las mentes brillantes de la pedagogía en los sindicatos?.

Tradicionalmente somos una sociedad que no está contenta con nada, desgraciadamente porque desde el siglo pasado la vida comenzó a dificultarse en muchos sentidos; pero que quede claro, las y los maestros no se están quedando de brazos cruzados, los que pueden aportan para las producciones que saldrán por radio y televisión, otros desde sus comunidades hacen llegar escritos a las autoridades, en los que solicitan apoyo para que su alumnado pueda acceder al sistema a distancia, eso ¿quién se los reconoce?. Nos encanta ver paja en el ojo ajeno.

El calendario oficial 2020-2021 ya lo dió a conocer el titular de la SEP Esteban Moctezuma, el camino está trazado, con todo y puentes vacacionales y periodos de descanso, igualmente habrá fechas para consejo técnico escolar y, lo mas importante, certeza para el magisterio y la comunidad estudiantil. Falta saber cómo le haremos para los útiles, si ese esquema sigue vigente, y los libros y los exámenes.

Nos toca como sociedad trabajar diariamente y favorecer, en la medida de lo posible, que nos sigamos adaptando a la obligada vida que hoy tenemos, mientras no haya vacuna. La política tiene su curso y en el próximo proceso electoral podremos dar castigo a los que no cumplieron su palabra, pero ahora es momento de cumplir como ciudadanía en lo que podamos.