En Palacio de Gobierno no parecen querer tomar una decisión sobre lo que está ocurriendo en la parte alta del municipio de Coatepec, donde cientos de invasores de la CIOAC se atrincheran en terrenos que no son suyos, mientras los legítimos propietarios son desoídos por los tres niveles de gobierno.

Al parecer, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez no quiere mover el tema hasta en tanto no se aparezca por su oficina el Secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos que, pese a haber sido dado de alta en el hospital privado de la Beneficencia Española, sigue su proceso de recuperación tras un diagnóstico positivo de Covid-19, en su domicilio ubicado justamente en el municipio cafetalero.

Cuando Cisneros retorne a sus actividades, tal vez ya sea demasiado tarde, porque la rapidez con que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a través de la Sedatu, lleva a cabo las tareas de posesión y deslinde, pueden llevar pronto a un posible enfrentamiento entre las huestes de la CIOAC y los propietarios junto con defensores del agua y el medio ambiente, que no será justamente con abrazos.

Los campesinos que reclaman un área de 2 mil hectáreas, señalada por la Sedatu con base en una constancia falsa, no se encuentran simplemente a la espera de las resoluciones legales; están invadiendo y desmontando cada vez más terreno, impiden el paso de los propietarios legales a sus predios, cierran caminos y amenazan con violencia física, blandiendo machetes y otras armas disuasivas.

Ni el gobierno estatal ni el municipal han hecho maldita la cosa para que los invasores se mantengan fuera de terrenos que legalmente no les pertenecen. El gobernador Cuitláhuac García ni siquiera ha pronunciado media palabra para referirse a este conflicto, ciertamente generado por el gobierno federal pero que puede convertirse en un verdadero polvorín que haga recordar a su gobierno como omiso o cómplice de una injusticia y que generó un enfrentamiento sangriento a unos cuantos kilómetros de Palacio de Gobierno.

Unos 500 pequeños propietarios de esta zona están amenazados de perder su patrimonio, heredado de generaciones anteriores, o adquirido hace más de dos décadas. Aunque no es cultivada, la superficie de bosque mesófilo permite la recarga y el sostenimiento de los niveles del manto freático que dotan de agua para uso humano y animal, y para cultivos en la parte baja.

Con su desaparición a manos de los campesinos que buscan despojar a los propietarios actuales, la Sedatu no solo afectará derechos de estos últimos, sino contribuirá al rompimiento del equilibrio medioambiental que permite la dotación a centenares de miles de veracruzanos.

Los defensores del bosque y el agua, así como los propietarios legales, han encontrado oídos sordos tanto en el ayuntamiento de Coatepec, que preside el panista Luis Enrique Fernández, como en la Secretaría de Gobierno para lograr acciones que permitan contener a los invasores.

Por desgracia, tampoco han hallado eco en la Fiscalía General de Veracruz, a cargo de la abogada Verónica Hernández Giadáns, ante la que se han presentado cinco denuncias por invasión y daños ambientales. “Llevamos un año de reuniones donde no se ha resuelto nada, necesitamos que nos apoyen legalmente para sacar a esta gente”, señaló una propietaria.

Ana Laura Díaz, representante del comité y quien vive en la parte alta de la sierra de Coatepec, dijo a la periodista Flavia Morales, de AVC Noticias, lo que puede ocurrir ante la inacción de las autoridades:

“La gente está en una posición de defender hasta con la vida su tierra, son tierras de generaciones, son trabajadas día a día con el sudor de su frente; en este momento, la posición es difícil, y la gente de arriba sí va a tomar acciones más graves, hay riesgo de enfrentamientos”.

Los hechos pueden ocurrir, por cierto, en la antesala de los comicios de 2021.

Las benditas redes sociales

En la pandemia, el sector Salud sufrió recortes criminales

Al presidente Andrés Manuel López Obrador le urge que el país salga de la pandemia, así sea solo de pico.

Ve con fruición que, mientras dure el miedo a que la pandemia crezca, políticamente le será riesgoso olvidarse del tema para destinar recursos a sus tan preciados proyectos: la refinería de Dos Bocas, el aeropuerto de Santa Lucía, el Tren Maya y el corredor Transístmico.

No crea, sin embargo, que su gobierno ha estado demasiado preocupado por los problemas que los mexicanos enfrentamos en materia de salud. Mientras los hospitales se saturan o se niegan a recibir a personas con padecimientos diferentes, para López Obrador el Covid-19 va lentamente cayendo, cuando todos los demás ven exactamente lo contrario.

Mientras su contraparte norteamericana ha debido reconocer que la pandemia en Estados Unidos sigue galopante, acá andamos de plácemes, siempre según el Presidente, quien siempre parece vivir en una realidad alterna. Vea lo que dijo en la mañanera:

“Tenemos que seguir enfrentando esta pandemia que va a la baja, muy lentamente, pero a la baja. No hemos tenido problemas mayores en cuanto a hospitalización, se está perdiendo diariamente esta demanda donde se requiere que todos los integrantes del sector salud actúen para que haya camas, equipos y que no falten los especialistas, y vamos avanzando, saliendo adelante frente a este emergencia y a esta pandemia”.

Pero, mientras miles de médicos, especialistas, enfermeros y químicos han enfrentado la batalla en la primera línea de fuego sin las mejores armas, hoy nos enteramos que el gobierno federal sustrajo del sector Salud ¡1 mil 884 millones de pesos!, sólo entre enero y mayo, justo los meses más decisivos para que se contuviera el crecimiento exponencial de contagiados y muertos por la pandemia.

El Informe de Avance Físico y Financiero de los Programas Presupuestarios Enero-Mayo 2020 de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público señala que, de un gasto previsto en salud por 128 mil 826.4 millones de pesos, quedó en 126 mil 942.1 millones de pesos, un recorte total de 1.5 por ciento. Dichas revelaciones fueron, tal vez, la razón del escarnio público que AMLO le recetó este miércoles al titular de la SHCP, Arturo Herrera, durante la mañanera.

Al Programa de Vigilancia Epidemiológica le recortaron 96.9 millones de pesos (tenía programado recibir 249.4 millones, pero se pagaron sólo 152.5 millones); a la subsecretaría de Prevención y Control de Enfermedades, que dirige Hugo López-Gatell, le trasquilaron 47 millones (pasó de 192.7 a 145.7 mdp)

Ya ve que López-Gatell culpó a las refresqueras (y no le falta un gramo de razón) de haber enfermado a los mexicanos con diabetes y exceso de peso, que fueron fatales para quienes enfrentaron así el Covid-19. Bueno, pues los programas para la Prevención y Control de Sobrepeso, Obesidad y Diabetes sufrieron también uno de los mayores recortes en el presupuesto: ¡le cortaron 232.1 millones de pesos!

Ya sabemos, entonces, por qué la necesidad de echarle la culpa a las refresqueras, cuando se mermó capacidad al sector Salud para combatir el consumo de bebidas edulcoradas y alimentos chatarra.

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Consejeros del INE, ¡habemus!: #NiCuotasNiCuates

A pesar de las pataletas de John Ackerman, quien pedía a los diputados de Morena torpedear la propuesta de las quintetas con las que sólo él no estuvo de acuerdo, este miércoles los grupos parlamentarios en la Cámara de Diputados alcanzaron un acuerdo en la Junta de Coordinación Política para designar a los cuatro nuevo consejeros electorales del INE y, más tarde, parecía que no tendría cambio la cuarteta.

El consenso fue en torno a Uc-Kib Espadas Ancona, José Martín Fernando Faz, Carla Humphrey Jordán y Norma Irene Cruz Magaña, lista que por la tarde fue presentada en la sesión extraordinaria de la Cámara de Diputados; donde suponemos (hasta el momento de escribir estas líneas) fueron aprobados por dos terceras partes de los legisladores presentes en el salón de Plenos en San Lázaro.

Mario Delgado cumplió: #NiCuotasNiCuates; la Jucopo dio el visto bueno a 4 personas que integraban las quintetas elegidas por el comité técnico de evaluación para la selección de los 4 consejeros y consejeras del INE.

Los cuatro consejeros y consejeras, por cierto, luego de los berrinches y críticas de John Ackerman (que hasta acusó a sus compañeros del comité técnico de “actos de violencia política de género en contra de la (su) candidata #DianaTalavera”), resultaron lo que avaló Morena.

¿Quiénes son los candidatos y candidatas de Morena al Consejo General del Instituto Nacional Electoral, avalados por todos los partidos?

Norma Irene de la Cruz Magaña, de 44 años, es licenciada en Periodismo y Comunicación por la FES Aragón y maestra en Gestión del Mantenimiento de la Paz por la Universidad de Turín. En 2019 se desempeñó como Asesora Técnica Electoral de la Comisión Nacional Independiente Electoral de Somalia. Fue coordinadora de observadores en misiones de observación electoral de la Unión Europea en las elecciones extraordinarias de Perú 2020, en las elecciones presidenciales de El Salvador en 2019 y las legislativas de ese mismo país en el 2018. Ha fungido como observadora electoral en Uganda, Uzbekiztán, Ucrania, Sri Lanka y Macedonia. Fue jefa del Departamento de Elecciones de la Misión en Kosovo (2014-2015) y asesora en el Reino Unido para el programa iraquí de voto en el extranjero (2010).

Carla Humphrey Jourdan es licenciada en Derecho por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), además es candidata a Doctor en Gobierno y Administración Pública por el Instituto Universitario Ortega y Gasset y la Universidad Complutense de Madrid. De 2006 a 2013 fue consejera electoral del Consejo General del Instituto Electoral del Distrito Federal. Antes, de 1997 al 2001 fungió como asesora del Consejo General del Instituto Federal Electoral. Desde el 2006 es integrante de la Asociación Mexicana de Consejeras Estatales Electorales. En 2007 fundó la Asociación Nacional de Consejeros y Consejeras Electorales de los Organismos, y está estrechamente vinculada con el jefe de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Santiago Nieto.

José Martín Faz es licenciado en Filosofía, especialista y maestro en Democracia y Derechos Humanos, tema al que se vinculó desde la década de los 90 al fundar el Centro Potosino de Derechos Humanos, AC. Ha participado en cursos y foros nacionales e internacionales sobre Derechos Humanos, y cursó la Maestría en Derechos Humanos y Democracia en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), sede Ciudad de México. Fue Consejero Ciudadano del Instituto Federal Electoral (IFE) para la Junta Local de San Luis Potosí en el proceso electoral federal 1999-2000 y el 2011-2012 y Consejero Electoral en el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de San Luis Potosí, nombrado para el periodo 2014-2020.

Uuc-kib Espadas Ancona fue Diputado federal por Campeche (2000-2003), formó parte de las comisiones para la Reforma del Estado, Cultura, Vigilancia del destino de los recursos del Fonden por el huracán Isidore, y de Puntos Constitucionales. Es Licenciado en Antropología Social por la Escuela de Ciencias de la Universidad Autónoma de Campeche, se ha desempeñado como articulista para medios estatales y nacionales, y es autor de los libros «Las elecciones de 1991. La recuperación oficial», «Estructura socioeconómica» y «Estructura social y económica de México».

Frases sin disfraces

“Tenemos que seguir enfrentando esta pandemia que va a la baja, muy lentamente, pero a la baja. No hemos tenido problemas mayores en cuánto a hospitalización, se está perdiendo diariamente esta demanda”. Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Comentarios: belin.alvaro@nullgmail.com

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