En su calidad de Procurador de Medio Ambiente, Sergio Rodríguez Cortés explicó que la decisión de clausurar el Crematorio “La Luz” (ubicado en la ciudad de Veracruz) fue un acto de legalidad, debidamente justificado por las diversas anomalías e inconsistencias del comercio, que sin duda vulneran los derechos ambientales de la ciudadanía porteña.
“La Luz”, expuso el funcionario, es un sitio que tiene como actividad principal la cremación e inhumación de restos humanos y el inicio de sus operaciones comenzó desde 1989. Desde hace varios años, la sociedad ha denunciado que de este lugar se desprende una nube de humo de color negro, provocando un intenso olor presuntamente debido al mal funcionamiento del quemador postcombustión del horno crematorio utilizado para la incineración de cadáveres.
En uso de sus atribuciones y facultades de Ley, la Procuraduría ordenó una inspección de rigor, pues la incineración de restos humanos produce emisiones de gases y partículas sólidas a la atmósfera que dañan el ecosistema y la salud de la ciudadanía.
Fue entonces que el pasado 24 de junio, se llevó a cabo la orden de inspección, con el objetivo fundamental de que “La Luz” presentase documentación básica como la Licencia Ambiental de Funcionamiento, el Registro como Generador de Residuos de Manejo Especial y el Plan de Manejo y Bitácoras que exige la Secretaría del Medio Ambiente.
No obstante, hasta la fecha el crematorio no ha mostrado dicha documentación, en términos de la Ley Estatal de Protección al Ambiente y la Ley de Prevención y Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos y de Manejo Especial.
De tal manera, el 9 de julio la Procuraduría determinó como medida precautoria una Clausura Parcial Temporal de “La Luz” (únicamente en el área de hornos crematorios). Sin embargo, dado que los dueños agredieron y se opusieron al trabajo de la dependencia, se decretó la clausura total del lugar.
En efecto, los propietarios violentaron verbalmente a los representantes de la institución, además de que quitaron los sellos de clausura para actualmente estar funcionado de manera normal, pese a las diversas anomalías detectadas por la PMA, operando de manera omisa e irresponsable.
Como se advierte, la dependencia justificó su actuación, pues en todo momento se garantizó la legalidad de sus determinaciones, como se comprueba en los expedientes de las diversas denuncias en contra del crematorio.
Por supuesto que es de llamar la atención que ciertos grupos de poder hayan intervenido en el caso, grupos que han intentado mediatizar el tema por algún tipo de interés directo, ya sea político o económico.
Estas presiones no serán suficientes para revertir la determinación, porque primero es el interés general de la población, con la mejora de las condiciones ambientales de Veracruz y haciendo cumplir las leyes, reglamentos y normas en la materia.
Por último, Sergio Rodríguez comentó que la Procuraduría del Medio Ambiente continuará su labor sin miramientos ni privilegios, porque es una institución plenamente especializada en la promoción y defensa de los derechos ambientales de las y los veracruzanos.
AVC