En Veracruz, 90 personas hablantes de lengua indígena se han analizado por sintomatología de Covid-19, de ellas 57 son positivas a la prueba y 16 han fallecido por contagio, de acuerdo a los datos de la Secretaría de Salud Federal.
Entre abril y junio, diez hombres y cinco mujeres de entre 40 y 83 años han muerto, 13 de ellos fueron intubados y dieron también positivos a cuadros de neumonía.
Del total de pacientes analizados, 48 fueron hospitalizados, y el resto fueron pacientes ambulatorios. Solo 43 de los 90 pacientes fueron canalizados de una unidad monitora de enfermedades respiratorias.
Los municipios donde se detectaron estos casos son principalmente: Chicontepec, Coyutla, Ixhuatlán del Sureste, Papantla, Pajapan, Poza Rica, Zongolica, Veracruz y Xalapa.
También hay casos detectados en: Texhuacán, Uxpanapa, Magdalena, Rafael Delgado, San Andrés Tuxtla, Atlahuilco, Coahuitlán, entre otros.
Investigadores del Programa Universitario de Estudios de la Diversidad Cultural y la Interculturalidad (PUIC) de la UNAM realizan un mapa sobre los Pueblos indígenas y negros de América Latina impactados por COVID-19, en el cual muestran que hasta el 14 de junio, 214 de estos grupos en 12 países ya habían sido alcanzados por la pandemia, y la expectativa es que aumenten los casos en la región.
En el mapeo se detectaron al menos nueve municipios veracruzanos donde se encuentran entre los pueblos indígenas impactados por la pandemia del coronavirus, cuyas condiciones los hacen aún mas vulnerables a la emergencia sanitaria.
Según este estudio, los municipios de Papantla, Poza Rica, Martínez de la Torre, Orizaba, Cosamaloapan, Santiago Tuxtla, San Andrés Tuxtla, Acayucan y Coatzacoalcos, figuran entre aquellos con mayores impactos por la pandemia.
Los pueblos impactados en este monitoreo son: nahua y totonaca en la zona norte de Benito Juárez, Coatzintla , Papantla, Poza Rica y Chinanteco y zapoteco en Santiago y San Andrés Tuxtla, Ixhuatlán del Sureste.
El investigador de la sede Oaxaca del Programa, Nemesio Rodríguez, señaló que en estos sitios los servicios que reciben en general “son de última categoría”.
Estos grupos, explicó Rodríguez, son más vulnerables al SARS-CoV-2 por el abandono que sufren del Estado y porque los servicios que reciben en general “son de última categoría”: no cuentan con agua o tienen dificultades para acceder a ella; en los centros de salud no hay insumos ni la infraestructura requerida. “Si no cuentan con elementos suficientes para atender los problemas normales, mucho menos en una estructura de pandemia”.
Con las cifras actualizadas de la Secretaría de Salud, estos nueve municipios se acumulan 2 mil 15 de los 9 mil 169 casos confirmados en la entidad veracruzana hasta este jueves.
El mapeo de la UNAM, incluye a pueblos indígenas y negros de por lo menos 10 países, entre ellos México, y señala que la pandemia en estos grupos es peligrosa, pues en algunos casos puede llevar a su desaparición, principalmente en los que involucran países de la cuenca Amazónica.
“Hay grupos muy pequeños de 100 a 150 personas y los primeros afectados son los que guardan la memoria, es decir, los viejos. La situación es grave”, insistió el investigador.
Lamentó qué hay casos en donde están asentados estos grupos se sobrepone la economía a la vida y la salud, ya que la minería legal e ilegal ha seguido operando, así como las explotaciones forestales, las invasiones de tierras y los megaproyectos en los territorios con marcadores históricos étnicos.
AVC/Perla Sandoval/Flavia Morales|