Entre los puntos aprobados el pasado martes por el Congreso de Veracruz en materia electoral, destaca la reducción del periodo de los presidentes municipales, que ya no será de 4 sino de 3 años.

Esa es la llave para la reelección de ediles, que era un tema pendiente en Veracruz.

El año pasado, los presidentes municipales veracruzanos del PRD asumieron una posición similar a la del Partido Acción Nacional y se pronunciaron en favor de la reelección de alcaldes.

Juan Carlos Mezhua Campos, de Zongolica, declaró en su momento que su partido pediría al Congreso del Estado que se inicie la discusión sobre dicho tema, que ya había sido aprobado en el ámbito federal y, por tanto, era ya una ley vigente.

La reelección de presidentes municipales no aplicaba en Veracruz, porque en la entidad el periodo de los ediles era de 4 y no de 3 años.

El tema fue planteado por la bancada panista en el Congreso desde el 27 de junio de 2019, cuando el diputado Sergio Hernández, quien coordinaba dicho grupo, presentó una iniciativa que reforma los Artículos 21 y 70 de la Constitución, mediante la cual los alcaldes veracruzanos podrán repetir en sus cargos a partir de 2021.

La propuesta de Sergio Hernández reducía el periodo de los ayuntamientos de 4 a 3 años.

En días recientes, el diputado panista comentó que ese era uno de los temas pendientes y que estaba contemplado dentro de su agenda legislativa; dijo que esa modificación significa que las elecciones municipales se homologuen con las de diputados locales y federales.

Probablemente esa sea la modificación más importante incluida dentro de la reforma aprobada en Veracruz el martes pasado y no la relacionada con la revocación de mandato.

En casi todo el país las leyes estatales se habían homologado con la legislación federal, a efecto de que los alcaldes duraran 3 años en el cargo y pudieran  reelegirse. En la entidad veracruzana no era así, pero eso cambiará a partir de 2021.

En 2018, en 23 estados del país que permiten la reelección de autoridades municipales hubo procesos electorales; 320 alcaldes intentaron repetir pero más de 100 se quedaron en el camino, a pesar de que, en teoría, tuvieron todo, dinero, apoyo político, grupo y control político para lograrlo.

224 presidentes municipales lograron la reelección; entre ellos, los de Monterrey, León e Irapuato; sin embargo, en más de mil ayuntamientos hubo cambios de alcaldes.

La ecuación parece simple: si un alcalde es competitivo y eficiente, si resuelve problemas y atiende las necesidades de su municipio, 3 o 4 años son pocos. En contraparte, si el presidente es desidioso, indolente, apático, irresponsable e incompetente, tres años son demasiado y se convierten, como en el caso de varios veracruzanos, en un verdadero martirio para la población que en muchos casos debe padecer problemas elementales y de urgente solución, como los relacionados con el suministro de agua, la recolección de basura o la inseguridad.

Xalapa, por ejemplo, ha tenido alcaldes que bien pudieron haber repetido en el cargo sin mayores problemas; por otro lado, también ha sufrido el paso de ediles que desde su primer año ya dejaban ver el fracaso en el que se convertirían. Al final, sólo los ciudadanos tendrán la posibilidad de reconocer, avalar o en su defecto castigar con su voto el desempeño de sus autoridades. @luisromero85