Este martes, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública difundió las cifras de la incidencia delictiva correspondientes al mes de diciembre de 2019 y con ello cerró el registro de 2019.

En Veracruz, durante el duodécimo mes del año se integraron 4 mil 377 carpetas de investigación. En esa ellas se incluyen 91 homicidios dolosos –la cifra más baja del año–, 5 feminicidios –también la cifra más baja–, 13 secuestros, y mil 424 robos.

En el acumulado anual, Veracruz registró mil 358 homicidios dolosos, 157 feminicidios, 298 secuestros y 19 mil 744 robos.

La entidad se consolidó el año pasado como la que más registra casos de secuestro en el país; para dimensionar el problema basta decir que 22 de cada 100 secuestros en el país se originaron en el estado

El reporte del Secretariado Ejecutivo coincidió con la comparecencia de la titular de la Fiscalía General del Estado ante el Congreso local.

Ante los diputados locales, Verónica Hernández Giadáns no evadió al tema; al contrario, dio a conocer resultados que hablan del trabajo del organismo autónomo y particularmente de la Unidad Especializada en Combate al Secuestro.

La fiscal confirmó los datos del SESNSP, los 298 casos, y apuntó que se logró la captura de 147 presuntos responsables.

Destacó también que fueron desarticuladas 22 bandas delictivas que se dedicaban a ese ilícito, que se cumplieron 37 órdenes de aprehensión giradas por la autoridad judicial y que se obtuvieron 56 sentencias condenatorias.

Por supuesto, al incrementarse las detenciones de presuntos secuestradores, el delito comenzó a registrar una reducción en la última etapa de 2019.

Verónica Hernández llegó a la Fiscalía como encargada del despacho al iniciar septiembre de 2019. Durante los meses previos, la entidad registró alarmantes niveles de secuestro: en enero se denunciaron 39; en febrero, 40; en marzo, 32; y así podríamos seguir con el número de casos mes por mes. Durante los 8 primeros meses del año pasado, Veracruz registró 218 casos de este delito para un promedio de 27.25 cada mes.

El secuestro se había convertido en el Talón de Aquiles de Veracruz en materia delictiva.

Una vez que Jorge Winckler fue relevado del cargo de fiscal y en su lugar llegó la nueva titular, el problema comenzó a estabilizarse; muy probablemente las capturas de secuestradores y de bandas dedicadas a este ilícito fueron determinantes para que en la entidad comenzaran a notarse avances en la materia.

De los 39 y 40 casos de secuestro con los que comenzó el año,  Veracruz llegó a noviembre y diciembre con 13; es decir, la reducción fue de 64 por ciento. Nada mal para un organismo como la Fiscalía y para una fiscal como Verónica Hernández, quien recibió como herencia un ente lleno de irregularidades, con un enorme rezago y con evidente incapacidad para realizar el trabajo encomendado.

En tiempos de Winckler, la FGE resultó sumamente ineficiente y ello se reflejó en los índices de secuestro; las bandas operaron en la entidad sin mayores problemas, con la tranquilidad que les habría dado la impunidad.

El cambio de titular y la llegada a la FGE de gente con una visión diferente y con mayor compromiso ha representado para Veracruz un importante avance, al menos en el tema de la procuración de justicia. La reducción en la incidencia del secuestro es un buen ejemplo. @luisromero85