En el hazmerreír del país se convirtió este viernes el presidente Andrés Manuel López Obrador luego de que en la mañanera explicara, con toda seriedad como para tomarlo en broma, cinco opciones para la venta del avión presidencial, a las que había llegado tras haber ocupado todo el jueves a pensar en ello.
Una de ellas fue el acabóse de sus ocurrencias en poco más de un año de estar al frente del Ejecutivo federal: «Una rifa de 500 pesos, 6 millones de ‘cachitos’, en la Lotería Nacional (…), se daría al que ganara el avión, ya incluido, un servicio de operación de dos o un año».
De inmediato, la imaginación popular se desbordó en todo el país al imaginar que un ciudadano común y corriente se ganara el armatoste que cuesta millones de dólares mantener en un hangar particular en Estados Unidos.
Nadie en su sano juicio imagina ganarse, con 500 pesos, el Boeing 787-8 de la serie Dreamliner, con acabados de lujo, que sería tanto como ganarse “la rifa del tigre”, cuando al ganador le pudieran entregar el tigre sin jaula ni amarres.
El grave problema de las propuestas de AMLO es que son voladas prácticamente todas, y la mejor sería utilizarlo para sus viajes presidenciales, con la salvedad de que él nunca quiere ir al extranjero, y hacerlo por el país significaría políticamente alinearse a los fifís a quienes tanto ha criticado.
Es difícil recordar para cuántos proyectos y soluciones ha destinado López Obrador el importe de la venta, pero a estas alturas nadie que escuche que con eso le van a resolver el problema va a tomar en serio las palabras presidenciales.
Sobre todo, porque una de las propuestas es hacer trueque por equipamiento médico para hospitales del país. Lo cierto es que al presidente, con sus ocurrencias, se le fue el avión.
Aquí, una muestra de los memes…