En este morenismo kafkiano todo es posible. Ojalá y el gobernador estuviera tan enterado de algunos delicados asuntos de Estado como lo está de la iniciativa que ayer presentó el diputado local priista Jorge Moreno Salinas, para establecer un mecanismo de sustitución en caso de la ausencia temporal o definitiva del mandatario en turno.

En un capítulo muy similar a la ley Bonilla de Baja California –en el que Morena opera para que sea la oposición quien presente la iniciativa que busca manipular la decisión de los electores y así diluir su costo político- resulta que no reparó en halagos y reconocimientos a los diputados proponentes, sino que dio cátedra de su contenido y alcances. La alegría y agradecimiento del gobernador eran inocultables.

Sin embargo, no deja de llamar la atención que Cuitláhuac García esté pensando en qué hacer en caso de que se vaya. A diferencia de Jaime Bonilla, quien aún pretende ampliar el periodo de gobierno para el que fue electo, el mandatario veracruzano prepara una salida sin sobresaltos, dejando la silla a quien ha ejercido de facto como gobernador en este primer año de la administración estatal.

“No voy a renunciar, se les va a cebar a quienes piensen así”, respondió ayer el gobernador al ser cuestionado sobre la iniciativa presentada por el PRI  en el Congreso del Estado y las especulaciones al respecto de su posible salida del ejecutivo estatal. En realidad, si se va a se queda es una decisión exclusiva del Presidente López Obrador; eso de que se les va a cebar es un mensaje a quienes pretendan impedir la transición pactada que ya echaron a andar.Hace tiempo que la dimisión de Cuitláhuac García se da como un hecho; la rumorología ronda sobre dos asuntos particulares. Primero, la razón de su salida, entre las que se menciona desde el fastidio del Presidente, la evidente incapacidad y desinterés del propio Cuitláhuac, hasta la existencia de un acuerdo previo en el que se había estipulado que el actual gobernador duraría en el cargo sólo dos años para después nombrar a alguien con mayor capacidad de operación de cara a la elección intermedia de 2021.Y segundo, el perfil del gobernador sustituto. De conseguir su propósito, Eric Cisneros no será Gobernador por su cercanía con Rocío Nahle, su activismo y ejercicio plenipotenciario de su función como Secretario de Gobierno, ni por el hecho de que una reforma a modo lo ponga en la antesala de la gubernatura sustituta. Lo será, insisto, porque así lo decida el Presidente. Lo demás sólo es una catarsis de nuestra adicción al chisme, el rumor y la leyenda urbana.Pero si alguien tenía alguna duda de la autoría de la iniciativa ayer presentada por el grupo parlamentario del PRI, el propio mandatario se encargó de confirmar que se trata de una estrategia de Morena puesta en las manos de sus aliados. Así, mientras el dirigente estatal priista Marlon Ramírez sostenía un encuentro con periodistas, su bancada en el Congreso proponía la ruta de la transición pactada.No recuerdo tema alguno del que el gobernador estuviera tan informado. Ante el azoro de reporteros que asistieron al primer arrío de bandera de 2020 en el parque Juárez, Cuitláhuac les explicó que se trata de una iniciativa análoga de la ley federal, con el objetivo de que quede bien definido qué se debe realizar en casos circunstanciales de sustitución temporal del Poder Ejecutivo.Los compañeros del gremio no acababan de salir de la sorpresa, cuando el mandatario les dijo que “no se trata de especular; sé que algunos se mueren por especular con una supuesta ‘Ley Cisneros’, pero es falso, la presenta otro partido, el PRI; la diputada Erika Ayala ya dio una entrevista donde dice eso, que se trata de homologar”; así reconoció la iniciativa de la misma dirigente sindical que hace algunas semanas fue vilipendiada mediante denuncias presentadas por el secretario de Educación En una afortunada coincidencia con los considerandos de la iniciativa presentada, el mandatario explicó que lo que se buscaba es que “ante la ausencia del Gobernador, quede bien definido el mecanismo y no sólo quede en una disputa del Congreso, porque se trata de un tema delicado”. En los últimos 30 años ha habido dos gobernadores sustitutos: Dante Delgado y Flavino Ríos, y en ningún caso hubo conflicto político para su nombramiento, a pesar de que el segundo llegó en medio de la tormenta.¿Cómo podría el gobernador conocer al detalle una iniciativa que ni siquiera acabada de ser turnada a comisiones en el Congreso? Es posible que se le cebe a quienes intentan atajar el la sucesión anticipada de Morena; pero también se le podría cebar a quienes intentan a la mala manipular la decisión popular.

Ya lo dijo el presidente: los conservadores –en realidad sólo se refiere a sus adversarios- podrían volver al poder.

Las del estribo…

  1. Denuncias por cobros de medicinas para tratamientos de cáncer, pacientes que pagan hasta 5 mil pesos por atención que debería ser gratuita, estados que se niegan a firmar el convenio para desaparecer el Seguro Popular y echar a andar el Insabi. El nuevo Instituto de la Salud nació con malformaciones que lo mantienen en terapia intensiva.
  2. Todavía no cumplidos diez días del nuevo año y ya nos cayó el balde de agua fría. El Banco Mundial recortó a 1.2 por ciento su expectativa de crecimiento para la economía de México en 2020; la anterior previsión era del 2.0 por ciento. En el informe Perspectivas Económicas Mundiales, el organismo internacional también previó que México tuvo un crecimiento de 0.0 por ciento en 2019. Todo pinta para que tengamos el segundo año sin crecimiento, aunque el ganso de la 4T se aferre a sus datos.