El cortisol es una sustancia generada por los mamíferos y animales de otras clases; sin embargo, una persona en situación de estrés libera dicha hormona en una mayor proporción, desencadenándose consecuencias que van desde la aparición de úlceras e hipertensión arterial hasta muerte temprana, es decir todo lo que se conoce como síndrome de Cushing.

Carlos Manuel Contreras Pérez, investigador del Instituto de Neuroetología de la Universidad Veracruzana (UV), dijo que al tratar de identificar las sustancias que reaccionan cuando una persona está en condición de estrés, en un inicio se empezó a trabajar con adrenalina, respuesta general del estrés, pero con el tiempo se supo del cortisol, mejor conocido como cortisona (en su presentación sintética), cuya liberación máxima es durante las primeras horas del día.

El científico, egresado de la carrera de Medicina en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y con Doctorado en Ciencias Fisiológicas por la misma institución, trabaja en esta línea de estudio desde hace más de 40 años y explicó que hoy en día se sabe que el mejor analgésico desinflamatorio que conocemos es la cortisona y sus 40 derivados.

Sin embargo, para el ser humano el cortisol no es benéfico, por el contrario, tiene efectos colaterales como úlceras e hipertensión arterial, lo que se conoce como síndrome de Cushing, el cual se desencadena cuando hay un exceso de esta hormona producida por las glándulas adrenales.

“Suponemos que, a través de un proceso de selección natural, el cual ocurre en todas las especies, se ha determinado que haya ciertas condiciones encaminadas hacia la supervivencia.”

Reiteró que la generación del cortisol es una respuesta que pertenece a varias especies y prepara al organismo de los individuos para el día y para una eventualidad de estrés.

Dio a conocer algunos resultados sobre estudios realizados al respecto. Uno de ellos fue entre cirujanos, el paciente y el camillero, y se determinó que el que más se infarta es el primero de ellos. “Se encontró que el nivel más alto de cortisol lo tiene el cirujano, pero en paralelo se midieron sus niveles de ansiedad y resultó que también este especialista es el menos ansioso, lo cual quiere decir que ya no percibe su estrés”.

Carlos Manuel Contreras Pérez, investigador del Instituto de Neuroetología

De ahí derivó otro estudio con cuidadoras de enfermos y personas con discapacidad, cuyos resultados dieron a conocer que ellas son las que liberan más cortisol (el cual se mide en saliva, orina o plasma). Pero al igual que los cirujanos, se han hecho resilientes, pues ya no se dan cuenta que viven una situación de divergencia constante.

14 millones de mexicanos sufren depresión

En otro orden de ideas, el investigador adscrito al Sistema Nacional de Investigadores (SNI), se refirió a otros estudios sobre el análisis de la aspirina y los antidepresivos desde hace más de 20 años.

La intención inicial fue para saber por qué la gente se deprime; hay quienes salen adelante ante situaciones difíciles, mientras que otras personas no. “No se trata de que sean cobardes e inútiles, simplemente que hay una falla en su proceso sinóptico que no se ha acabado de identificar, eso impide que las personas reaccionen, se levanten y sigan adelante”.

Esto es algo que se conoce una vez que se estudia lo que ocurre en cerebro deprimido, comparado con uno sano y ver cómo restablecerlo.

Señaló que la depresión es una patología muy frecuente, ya que el 14 por ciento de la población la padece; es decir, 14 millones de mexicanos sufren depresión en la actualidad, problemática que va al alza. Lo anterior, acarrea el enorme riesgo del suicidio pues una cuarta parte de los deprimidos se suicida.

Esta línea de investigación, dijo, se apoya mucho en Darwin, sobre cuáles son las estrategias que ha seguido la naturaleza para establecer una selección natural que nos hace ser como somos.

Aseveró que el trabajo de la ciencia es la generación de conocimiento sólido y fuerte. Por tanto, el estudio del cerebro lleva a comprender mejor el comportamiento de los individuos.

“Las neuronas son elementos del sistema nervioso que funcionan de forma idéntica en todas las especies.”

En la medida que sepamos más y mejor cómo funciona el cerebro podremos establecer mejores alternativas de tratamiento, diagnóstico y prevención de los padecimientos, acotó.

UV/Claudia Peralta Vázquez

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