En Perote, uno de los principales problemas para la población es el relacionado con el abasto de agua.
Durante los meses recientes, el asunto del agua en este municipio, muy cercano a la capital veracruzana, se ha complicado, afectando a miles de personas.
En su segundo informe de gobierno, el alcalde Juan Francisco Hervert Prado retomó el tema y reconoció que se trata de “un problema social que requiere atención inmediata”; y pidió a las autoridades estatales coordinación para que suministrar de forma suficiente el líquido a los peroteños.
Aseguró el edil que su administración tiene la disposición de apoyar en la perforación de un nuevo pozo que incremente el abasto.
Como parte de las acciones para contrarrestar los efectos negativos de la falta de agua, la autoridad municipal distribuyó más de 21 millones de litros a las zonas que más lo requieren, esto durante 2019.
En Perote, el servicio de agua entubada no corresponde al Ayuntamiento, sino a la Comisión estatal; precisamente por ello, la autoridad local explora la ruta de la municipalización del agua como una vía para la solución del problema.
Lo destacable es que el gobierno municipal no evade el tema ni arroja la papa caliente a la instancia estatal, sino que asume una posición autocrítica y plantea la necesidad de sumar esfuerzos para resolver uno de los grandes problemas en ese lugar.
Cualquier otro edil se libraría de la crítica culpando al gobierno estatal; el de Perote no lo hizo, sino que canalizó recursos para suministrar agua a la población y plantear, como una posible solución, hacerse cargo del abasto de manera formal, lo que implica el compromiso de canalizar importantes para las obras y los equipos necesarios.
El alcalde rindió su segundo informe el pasado viernes; en ese marco, se refirió a la obra pública y destacó el esfuerzo para rescatar recursos pendientes de 2016, que permitieron la pavimentación de 37 calles en la cabecera.
Indicó que este año se realizaron 109 obras prioritarias con una inversión superior a 96 millones de pesos.
Juan Francisco Hervert Prado expuso que como nunca antes se utilizó el más alto porcentaje de recursos de todos los fondos para la mayor cantidad de obra pública.
Son más de 67 mil metros cuadrados de pavimentación, 12 mil metros lineales de guarniciones, mil 100 metros cuadrados de adoquín, 4 mil 400 metros cuadrados de banquetas, 8 mil 300 metros lineales de tuberías de drenaje, y más de 5 mil metros de líneas de agua potable; sin duda, resultados sobresalientes en materia de obra pública.
El edil peroteño reconoció al personal del sistema municipal para el Desarrollo Integral de la Familia, DIF, cuyo presidente, Juan Francisco Hervert Rivera, también rindió su informe en el mismo evento.
El caso del DIF de Perote es un ejemplo de todo lo que se puede hacer en un organismo que se ha concentrado en la atención a los grupos vulnerables.
Del trabajo en ese organismo se podría citar el programa “Ver para avanzar”, una campaña de salud visual que entregó 950 lentes y mil 250 más a estudiantes de nivel básico; y logró 160 operaciones de cataratas.
El DIF de Perote entregó este año 158 aparatos funcionales; casi dos mil cobertores en comunidades vulnerables; 2 mil 700 pares de zapatos para estudiantes; 23 mil medicamentos y casi diez mil consultas médicas; sin contar con los programas de apoyo a personas de la tercera edad, a niños y mujeres.
Fueron, en síntesis, las cuentas de un ayuntamiento que a juzgar por el segundo informe, ha dado prioridad a la atención de grupos vulnerables. @luisromero85