La Sociedad en México no soportará otra crisis económica, el desbordamiento social se intensifica ante un modelo económico que no resiste los embates globales. Las potencias se disputan el poderío, sus transnacionales accionan bajo la dinámica de los movimientos financieros, y las inversiones las hacen con prudencia desmesurada, bajo la reserva de sus intereses. Las economías emergentes se encuentran ya inmersas en una crisis que les encamina hacia la recesión, con pocas, casi nulas probabilidades de contenerla. China y los EEUU, fortalecen su expansión, con drástica prudencia, miden la insuficiencia de la desaceleración de los países en vías de desarrollo; signos y síntomas claros, que, sin duda, demuestran descortesía en la posición financiera acumulada, colocando a los poseedores de los dineros en situación privilegiada para seguir creciendo.

Acompañado esto, de las espinosas burbujas financieras que han venido sometiendo a nuestro país, en una depreciación interna de la moneda, deteriorando el poder adquisitivo. Las “estrategias” de colocar dinero de las reservas para fortalecer el peso ante las divisas internacionales, simplemente es incorrecto, no están funcionando, porque, se deprime el poder adquisitivo; ante esto, la “solución” socorrida  para ello, es la política fiscal, que terminara afectando el volumen de los precarios ingresos de los trabajadores y de los inversionistas.

Los mercados financieros mundiales visualizan rendimientos negativos. El debate sobre la austeridad y los ajustes fiscales no garantizan escapar de la precariedad; las cámaras baja y alta de la República languidecen ante propuestas de recuperación que conllevan volatilidad financiera. Entre tanto, Veracruz, se sumerge aún más en un campo improductivo, catastrófico, que genera más hambre e inconformidad social, ante una Secretaría de Economía que duerme el sueño de los justos, en donde el responsable hace cuentas y cuentos alegres. No hay creatividad, no hay imaginación, hay indolencia, carencia cognitiva; en tanto los señores empresarios, se lamentan de las lamentaciones gubernamentales. Son tiempos revueltos, en donde la recuperación, se encuentra en fase de insuficiencia que no de corrección, en donde los desequilibrios económicos y sociales, ser aprestan hacia una crisis, no tan solo financiera, sino sensiblemente social, en donde las incapacidades intelectuales y la inexperiencia, se suman al desvalijamiento que está sufriendo Veracruz ante la corrupción de la que ha sido explotado.

Imprevisible esperar una mejora, previsible visualizar el incremento del deterioro. Sin embargo, el pueblo resiste, inconforme ante las turbulencias de las barreras que provocan los riesgos económicos de contraer más deuda, entonces el Estado, alarga la batalla que ya tiene cansada a la sociedad.

Sintácticas

De Nicolás Maquiavelo, en su obra De las conjuras:

En Forli, Italia en 1448, el conde Girolamo Riario, Capitán General de la Iglesia Católica, fue asesinado  y apresaron a su mujer y a sus hijos, que eran pequeños; pretendiendo apoderarse de la fortaleza, los conjurados, dejaron libre a la señora Caterina, que así se llamaba la condesa, para que fuera a negociar. Ella, les prometió que, si la dejaban entrar en la fortaleza, conseguiría que se la entregasen, y que podían quedarse como rehenes a los dos niños. Los asesinos se fiaron de estas seguridades y la dejaron entrar, y en cuanto estuvo dentro, los cubrió de improperios desde los muros, acusándoles del asesinato de su marido y amenazándoles con una completa venganza. Y para demostrarles que no se preocupaba de sus hijos, les enseño sus órganos genitales, diciendo que tenía con qué hacer otros. Así los traidores, percatándose de su error y de su poco seso, cuando ya era demasiado tarde, pagaron su imprudencia con un perpetuo exilio.

De un observador:

Si el arzobispo Hipólito Reyes Larios, ha sido infectado por el virus del dengue…el Vaticano está enterado…y, desde luego, de toda la historia, que ha provocado la epidemia en Veracruz.

Regula Mühlemann. Wolfgang Amadeus Mozart. Exsultate, Jubilate. Alleluja KV 165.