Hay que reconocer que ahora sí salieron muy rápido a apagar el fuego de la desinformación. Lo que perversamente quisieron vender como un reemplacamiento impuesto a escondidas, resultó ser una alternativa para quienes por alguna razón –la falta de dinero es la más evidente- estamos atorados con el pago de la tenencia de años anteriores. Los autos nuevos deben hacerlo como siempre; los que aun debemos, podemos pagar los derechos vehiculares, reemplacar –lo que es sensiblemente menor a la deuda- y listo. No que perder de vista que cuando se adeudan pagos de la tenencia vehicular, el auto pierde valor y es mucho más complicado su proceso de compra-venta. El programa anunciado por el gobernador Cuitláhuac García busca que las personas recuperen el valor de sus vehículos y puedan comercializarlo sin problema, sin perder dinero, lo que también ayuda a la economía local. Seguramente, habrá quien vocifere en público pero resuelva su deuda en privado.