Si ya saben cómo es el Peje, ¿para qué se torturan viendo su Primer/Tercer Informe?

–Chopenjawer

Como si no hubiese suficientes problemas… En la carretera entre Álamo y Benito Juárez, entre los poblados Cacahuatengo y Piedra Grande, el viernes había dos cordones con gente bloqueando la carretera, obligando a que los vehículos se detuvieran para exigirles dinero.

Según datos, eran gente humilde aparentemente de la zona, armados con palos y machetes. De manera muy violenta golpeaban los vehículos que no se querían detener o pintaban carros distribuidores de frituras y refrescos con las siglas FNLS (Frente Nacional de Lucha por el Socialismo). Tampoco permitían que se les sacaran fotos y quienes lo hacían, eran «detenidos» para obligarlos a borrar las imágenes.

Los simpatizantes del Frente Nacional de Lucha por el Socialismo entregaban un boletín a los automovilistas para justificar su presencia en territorio de Ixhuatlán de Madero ese día 30 de agosto, Día Internacional del Detenido Desaparecido (el comunicado completo lo puede ver en columnasinnombre.com.mx).

A grandes rasgos, hablan de que, desde Vicente Fox hasta los días actuales, la violencia de lo que califican «terrorismo de estado» ha llegado a cerca de 300 mil ejecuciones extrajudiciales; más de 300 mil detenidos desaparecidos de manera forzada; y más de un millón de desplazados.

Detallan: «En los últimos 18 años, dos administraciones panistas y una priista, la detención desaparición forzada en México se reveló como un crimen de Estado de carácter transexenal y exponencial; no sólo se ejecutó por motivos políticos sino también por causas sociales».

De lo anterior, en dicho comunicado subrayan que «la violencia que surge del estado no ha cesado un solo instante, por el contrario, la tendencia es ascendente y cada vez más cruel, lo que significa la continuidad del régimen neoliberal».

«Como cada año, desde la década del 80 reivindicando el 30 de agosto, y hoy con FNLS exigimos la presentación con vida de todos los detenidos desaparecidos por motivos políticos y sociales, así como la de nuestro compañero Fidencio Gomes Santiz y de los revolucionarios Gabriel y Edmundo; la libertad inmediata e incondicional de Javier González Díaz; y el cese a represión contra nuestros compañeros en Chiapas», dice en la parte final del texto.

En Ixhuatlán de Madero, en plena Huasteca, no es la primera vez donde se reporta la presencia de grupos guerrilleros, y tienen motivos propios para reaparecer.

Rolando, Atanasio y Nicolás

En sus archivos, el FNLS tiene presente la detención, tortura, mutilación y ejecución extrajudicial de sus compañeros Rolando y Atanasio Hernández Hernández, el 8 de septiembre de 1994.

Para quienes no recuerdan el caso, se trata de lo siguiente: el día 8 de septiembre de 1994, aproximadamente a las 7 de la mañana, un número no determinado de policías judiciales del Estado de Veracruz y pistoleros al servicio del «cacique» y ex-presidente municipal de Ixhuatlán de Madero, Tranquilino Hernández, llegaron a la comunidad de Plan del Encinal, allanaron las casas, destruyendo cuanto encontraban al paso, e hirieron con arma de fuego a Rolando Hernández Hernández y Atanasio Hernández Hernández, de 17 y 28 años respectivamente, a quienes se llevaron amarrados cuando los policías se retiraron de la comunidad. El día 12 del mismo mes y año, fueron encontrados los cuerpos de Rolando y Atanasio Hernández Hernández por miembros de la comunidad de Cantollano en el Río Chiflón, 8 kilómetros abajo de donde sucedieron los hechos. Los cuerpos presentaban claras muestras de tortura (los cuerpos estaban muy golpeados y les cortaron los genitales, los cuales se los pusieron en la boca). Lo anterior es la introducción del expediente en la Corte Interamericana de Derechos Humanos, se trata del INFORME Nº 1/98 – CASO 11.543.

Estos hechos, a decir del FNLS, «continúan en la impunidad, mientras que los autores intelectuales y materiales de estos crímenes de lesa humanidad y de Estado siguen agazapados en el poder, más aún se les premia con puestos de mayor nivel en la administración “pública», en las diversas estructuras gubernamentales».

En el comunicado publicado el 8 de septiembre de 2017, se detalla: «Un año después en la comunidad de Canto Llano es ejecutado extrajudicialmente el compañero Nicolás Hernández Hernández el 18 de agosto de 1995, por luchar de forma organizada e independiente por la tierra y su defensa, por policías y pistoleros comandados por el cacique Rene Monroy».

Y subrayan: «Ambos crímenes derivaron de operativos policíacos con el conocimiento del secretario de gobierno estatal, en ese entonces Miguel Ángel Yunes Linares. El brazo ejecutor fue el expresidente municipal Tranquilino Hernández Reyna, sus pistoleros respaldados por policías judiciales y municipales, con el consentimiento de Elmer Prior expresidente municipal de Ixhuatlán de Madero, Veracruz».

El Hospital de Campo la Mata

Otro caso que causó mucho enojo a indígenas de la Huasteca, y especialmente de Ixhuatlán de Madero, fue el desalojo violento que sufrieron en Tihuatlán, en junio de 2002. Era el sexenio de Miguel Alemán Velasco (1998-2004) y por esas fechas se iba a construir un hospital en la comunidad Campo La Mata, pero terminó construyéndose en Llano de Enmedio por caprichos de un legislador local.

Por esa decisión de cambio de lugar, un grupo de alrededor de 300 indígenas decidió hacer una marcha desde Ixhuatlán de Madero hasta Xalapa; los reportes de seguridad pública y de política regional describían que los manifestantes venían fuertemente armados, pero sobredimensionaron la situación: sólo venían con machetes.

En ese entonces, los altos mandos andaban de vacaciones y desde sus lugares donde tomaban el sol, ordenaron que se desalojara a la gente que venía marchando. Primero se acercaron con helicópteros y los indígenas pensaron que eran funcionarios que venían a platicar con ellos, pero no: desde ahí les arrojaron los primeros gases lacrimógenos, para que luego la policía entrara a pie a reprimirlos y luego subió a los detenidos en calidad de bultos a camiones de la SSP.

De estos se recuerda un maestro jubilado muerto por asfixia –al menos reconocido oficialmente– ya que quedó debajo del montón de gente que iban trepando a las unidades oficiales. A los manifestantes los dispersaron por varias zonas, separando a las familias por toda la región.

El Paleocanal

En tiempos del presidente Vicente Fox se reactivó la explotación del Paleocanal de Chicontepec: un campo petrolero localizado en la zona norte de Veracruz que se estime cubre una extensión de 3 mil 800 kilómetros cuadrados

Desde ese entonces, se comentaba en las esferas de Seguridad Pública que había órdenes de los altos mandos para «generar problemas» o «situaciones» que requirieran de la presencia policiaca o militar en la zona, y así acostumbrar a los habitantes de esa región a ver la constante presencia de policías o fuerzas armadas.

Esa zona, inundada de pobreza, también ubica centros donde operan compañías petroleras extranjeras que distan mucho de la realidad del norte indígena de Veracruz: zonas americanizadas con helipuertos donde no entra nadie que no sea empleado del lugar, y que llevan largo rato explotando los yacimientos.

¿Qué cocinan en el norte?

Como si no hubiese suficientes problemas en Veracruz. Según los testigos de la reciente presencia de simpatizantes del FNLS en el camino entre Álamo y Benito Juárez, en todo el recorrido no se vio presencia de Seguridad Pública.

Otra versión –un poco menos creíble, la verdad, pero no debería descartarse– es que también lo anterior pudo haber sido una distracción para que se movilizara «mercancía» en el norte de Veracruz. Algo así como operan las narcoguerrillas.

Llama la atención también porque los gobiernos de MORENA se supone que conocen bien el tema de la guerrilla, dado que muchos de sus simpatizantes o militantes estuvieron en algún momento metidos en grupos radicales de izquierda.

Lo cierto es que, en la Huasteca, sea por la pobreza o sea por la delincuencia que puede estar amafiados con ellos, pero allá se está gestando algo.

Nota para pegar en el refri: Lo que no es tener madre: se robaron dos cruces y el monumento a las 298 víctimas de desaparición forzada que fueron localizadas en 156 fosas clandestinas del predio Colinas de Santa Fe, allá en el puerto de Veracruz, zona donde estuvieron realizando una gran labor los colectivos como Solecito, que concluyó la búsqueda de restos humanos a inicios de agosto. Lo anterior lo reportó el periodista Carlos Navarrete, en sus redes… En este sentido, Solecito expresó una postura: «Muy deplorable acto vandálico. No comprendemos semejante acción. Ese monumento sencillo estaba colocado en un lugar donde no estorbaba. Las cruces las colocaron dos madres sobre las fosas donde estaban los restos de sus hijos. Hasta ese sagrado derecho les arrebatan».

Otra nota: Que en Medellín de Bravo han decidido tirar 40 árboles y 405 arbustos sembrados por una obra en el parque El Tejar. Por lo pronto ya derribaron un kiosco que era parte del parque. Ojalá recapaciten: nomás vean cómo ha cambiado el clima de Xalapa desde que desaparecieron las fincas cafetaleras.

Otra nota extra: Muy calladita, sin llamar la atención, la secretaria de Energía, Rocío Nahle, a quien esta semana le ventilaron sus constantes viajes en el extranjero. Tampoco quiere hacer mucho ruido para no llamar la atención por el despapaye que hace su recomendado como secretario de Gobierno en Veracruz, que no informa, no tiene bien los reportes de inteligencia y sólo ocasiona crisis como la reciente, donde se mal informó al gobernador y se empinó al presidente… Ahí la llevan.

La última porque quiero dormir cansado: Por la mañana de este domingo, en Tuxpan, aparecieron un par de manos humanas tiradas en el bulevar Independencia, frente a la Escuela Secundaria Técnica Número 2 «Enrique Rodríguez Cano»; horas más tarde se confirmaría que se trataban partes de las extremidades de un menor de 15 años a quien «levantó» un grupo armado en horas recientes, literalmente lo pintó de gris y le puso un letrero que decía «Por rata me pasó esto».

@pablojair

pablojair@nullme.com