Hace 18 días, en conferencia de prensa, el secretario de Educación de Veracruz, Zenyazen Roberto Escobar García, denunció que según información obtenida de sólo 860 de las 2 mil 796 tiendas escolares concesionadas en escuelas secundarias y preparatorias del estado, habían detectado que 109 millones 405 mil 643 pesos que debieron utilizarse para mejorar los planteles educativos habían sido desviados.

Pero Zenyazen, quien a principios de abril denunció ante la Fiscalía General del Estado a exfuncionarios yunistas que se autoasignaron 77 plazas de los niveles medio superior y superior que le representaban al Estado una erogación de más de 5.5 millones de pesos, se ha quedado corto en su combate a la inmensa corrupción que persiste en la SEV.

Otro foco rojo sería la Dirección de Educación Tecnológica (DET) que tiene a su cargo los 21 tecnológicos y las universidades politécnicas del estado. Al frente de esta unidad administrativa que depende de la Subsecretaría de Educación Media Superior y Superior está María Luisa Siliceo Rodríguez, quien en el Instituto Tecnológico Superior de Xalapa (ITSX) se hizo gran amiga del actual subsecretario Jorge Miguel Uscanga Villalba, el cual, en el año 2004, le consiguió plaza docente dentro de dicho organismo público descentralizado, lo que desde entonces los hizo cómplices de actos académicos ilegales.

Uscanga Villalba fue su principal promotor ante el gobernador Cuitláhuac García para que fuera nombrada directora de Educación Tecnológica, presumiéndole que Siliceo Rodríguez era una eminencia académica y que conocía todo el sistema operativo de los Institutos Tecnológicos, pero omitiéndole obviamente los actos ilícitos que venía cometiendo contraviniendo los principios rectores de la Cuarta Transformación.

Y es que Siliceo es la representante legal de una asociación civil denominada “Consultores Asociados en Ingeniería Avanzada CASIA A.C.”, que durante ocho años ha realizado certificaciones que no están permitidas como opción de titulación dentro de los lineamientos del Tecnológico Nacional de México para que los egresados de los Tecnológicos se puedan titular.

De la constitución de dicha asociación civil dio fe el Notario Público número 26 de Banderilla, Jorge Armando Lince de la Peña, según consta en la escritura número 443 con fecha 02 de mayo de 2011.

En el caso particular de los Tecnológicos de Xalapa y Perote, mediante información obtenida vía el portal de transparencia, se corroboró oficialmente que no es permitida la modalidad de titulación por certificación. Sin embargo, la empresa consultora de María Luisa Siliceo “certificó” a los alumnos cobrándoles 5 mil pesos a cada uno. A la fecha, en el caso del ITSX se han titulado más de dos mil egresados bajo esta modalidad, por lo que

la citada empresa de la protegida del subsecretario Uscanga Villalba habría obtenido más de 10 millones de pesos sólo por un Tecnológico, pero así venía operando desde el año 2011 –al inicio del sexenio del ex gobernador Javier Duarte de Ochoa– según el acta constitutiva de dicha asociación civil, en la que aparece también como socio Raúl López Leal, actual secretario técnico del Consejo Veracruzano de Investigación Científica y Desarrollo Tecnológico (COVEICYDET), compañero de trabajo de Siliceo Rodríguez en el ITSX y amigo también del subsecretario de Educación Media Superior y Superior de la SEV.

Siliceo, aparte de lo que percibe por las certificaciones falsas, se embolsa otros 66 mil 385.60 pesos mensuales: 40 mil como titular de la Dirección de Educación Tecnológica y 26 mil 385.60 por su plaza en el Instituto Tecnológico Superior de Xalapa.