¿Qué pasaba por la cabeza de Cuitláhuac, cuando sentado a un costado del Presidente en Palacio Nacional, tenía que soportar el infierno de la vergüenza? Saber que López Obrador había tenido que salir a dar la cara por él, porque nunca encontró una respuesta razonable, lejana al balbuceo en el que intentó involucrar a su abuela paterna como un distractor.

Resulta que alguien le tomó la palabra al gobernador de Veracruz y se puso a indagar en la vida y milagros de su abuela paterna. Bastó con rastrear una generación más para confirmar lo que Cuitláhuac García siempre evadió responder y que la Contraloría del Estado ocultó o no quiso investigar ante lo obvio: el góber tiene metida a toda la familia en la nómina estatal, no sólo en el Ayuntamiento de Xalapa.

En algo no mintió el gobernador: la clave estaba en la abuela, quien registró a sus hijos, de diferente padre, lo mismo en Veracruz que en Puebla. Que Cuitláhuac García y Eleazar Guerrero se digan primos no es un modismo de barrio, sino que es la puritita verdad. Las actas oficiales del Registro Civil, revelan que existe parentesco entre el Gobernador del Estado y el Subsecretario de Finanzas.

A lo largo de este lunes, una serie de actas de nacimiento estuvieron circulando en las redacciones de algunos medios de comunicación. Se trata de los documentos que acreditan el parentesco entre ambos funcionarios, a partir del vínculo de medios hermanos de sus padres, ambos hijos de doña Manuel Durán, una mujer que ha saltado a la fama gracias a la buena fortuna de su parentela.

La copia de la primera acta del registro civil fue expedida apenas el pasado 11 de junio; es el acta 1207 del libro uno, en el que se da cuenta del nacimiento de Cuitláhuac García Jiménez el 18 de abril de 1968, siendo hijo de Atanasio García Durán y de Violeta Jiménez de García.

La segunda copia, con fecha de expedición de 10 de junio de este año, corresponde a Eleazar Guerreo Pérez, nacido en el estado de Puebla el 12 de mayo de 1962. En ella se señala como a su padres a Julio Guerrero y a Bertha Pérez, sin embargo, no se registra el segundo apellido de los padres, que en el caso de don Julio correspondería al Durán.

La tercera acta de nacimiento es del padre del gobernador, Atanacio (sic) García Durán, quien nació el 2 de mayo de 1943. El documento también fue expedido por el registro civil el pasado 11 de junio. En él se asienta que sus padres son los señores Wenceslao García y doña Manuela Durán, también sin referir apellidos maternos.

El último documento se trata del acta de defunción de don Julio Guerrero, padre de Eleazar y medio hermano de Atanasio, a decir de sus padres. Según  se establece, Julio Guerrero –quien murió el 14 de mayo de 2009 a causa de diabetes-, es hijo de don Trinidad Guerrero y doña Manuela Durán; nuevamente se omiten apellidos maternos.

Los documentos hechos públicos acreditan el parentesco de todos los involucrados, ya que Atanacio García Durán y Julio Guerrero Durán son medios hermanos, hijos de la señora Manuela Durán tal como se marca en las actas de nacimiento, aunque Atanacio nació en el estado de Veracruz y su hermano e hijos fueron registrados en Tlatlauquitepec, del estado de Puebla.

Por tanto, el Gobernador Cuitláhuac García Jiménez y el Subsecretario de Finanzas, Eleazar Guerrero Pérez son primos hermanos por parte de abuela, ya que son nietos de Manuela Durán. Este es el ejercicio simple y llano que toda una Contraloría General del Estado no pudo realizar, basándose sólo en la comparación de las credenciales de elector.

El asunto se complica porque si bien los hijos de Eleazar Guerrero que trabajan en el gobierno lo hacen en áreas distintas a la suya, resulta que son sobrinos del Gobernador y por tanto también se dan los elementos para fincar la responsabilidad por nepotismo. Hasta la hora de entrega de esta columna, ninguna autoridad del gobierno del estado se había pronunciado para desmentir la información publicada.

Por supuesto, Cuitláhuac y sus parientes seguirán en el gobierno, harán muchos negocios, mantendrán sus privilegios y la masa morenista podrá defender que tienen derecho a esa y otras mentiras, porque en el pasado los familiares fueron los grandes beneficiarios de la corrupción. Entonces, ¿porqué ellos no?

No falta mucho para que ni el manto inmaculado de Andrés Manuel los proteja.

Las del estribo…

  1. ¡Ese Hipólito es un loquillo! Primero dice que no encuentra buenos perfiles profesionales en Xalapa y los tiene que importar de CDMX y hasta de Neza para luego correrlos por inútiles. Después resulta que aquí sí hay perfiles, pero curiosamente los mejores pertenecen a la misma familia: la del Gobernador. Y al final se refiere al góber como el «diablo» mayor. Su forma de madrear al mandatario es sublime y de alta escuela.
  2. Parece que la revancha de los diputados locales que no han sido atendidos por la 4T llegará antes de lo esperado. El tema de Mixtla de Altamirano se les volvió a enredar a los genios de Palacio y no saben cómo van a lograr los 34 votos que necesitan para desaparecer los poderes y arrebatarle el municipio a los panistas. No tienen consenso. ¿Acaso se aventarán como el borras una vez más?