El estado de Veracruz está gastando infructuosamente una verdadera fortuna por mantener en la Fiscalía General del Estado al oaxaqueño Jorge Winckler Ortiz. Desde que fue nombrado por Miguel Ángel Yunes Linares, de quien siempre ha sido abogado personal, el titular de la FGE no le ha reportado nada a los veracruzanos; las pocas acciones emprendidas durante el yunato fueron ordenadas por su jefe con el mero ánimo de cobrar venganzas personales contra duartistas, pero Veracruz siempre se destacó por su elevadísimo índice de impunidad.

Con Cuitláhuac García, Winckler solo ha protagonizado pleitos de cantina, acicateado por el líder de una pandilla blanquiazul obstinada en recuperar el poder a costa de olvidar la impartición de justicia, la investigación de los crecientes hechos de violencia y el trabajo coordinado con el gobierno estatal del que forma parte, mientras ocupa la mayor parte del tiempo a fraguar escenarios apocalípticos para denostara los principales funcionarios de gobierno, en particular, a los secretarios de Gobierno y de Seguridad Pública.

Aunque pareciera una perogrullada, lo dicho por el gobernador Cuitláhuac García Jiménez en el sentido de que el crecimiento de la incidencia delictiva es culpa de la Fiscalía General del estado, porque no investiga, no persigue a los delincuentes, no castiga, tiene una buena carga de verdad; efectivamente, la falta del trabajo de la Fiscalía manda una señal inequívoca de que en Veracruz persiste la impunidad. En entrevista con medios en el marco del día del Ejército, exigió al Fiscal dar con la banda de secuestradores que asesinó y decapitó a una empresaria en Coatzacoalcos hace unos días.

Cuestionado sobre los índices de feminicidios, el gobernador dijo que, independientemente de las cifras, “el problema es que el fiscal no ha investigado ni uno, los feminicidas siguen sueltos; vamos a exhortarlo una vez más a que ya concluya las investigaciones porque mientras haya impunidad es un mensaje equivocado, porque los homicidas andan sueltos, y el fiscal no ha hecho nada por detenerlos”.

En efecto, la delincuencia ha ido creciendo y buena parte de la responsabilidad es la falta de estrategias, elementos policíacos suficientes e, incluso, carencia de vehículos en la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), cuyo titular, el regiomontano Hugo Gutiérrez Maldonado, ha denunciado un criminal desmantelamiento en el parque vehicular legado por el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares, que siempre se ensalzó por adquirir cientos de unidades, aunque tal parece que la mayoría las envió a las policías dependientes de ayuntamientos panistas y aliados.

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“A ver, mi “director” de CFE: explica en un tuit porqué antes temía a la militarización y porqué ahora la apoya con entusiasmo. Lo leo con atención”. @Donvix

Corrupción yunista dejó una SSP desmantelada

Según Gutiérrez Maldonado, de un parque vehicular de 2 mil unidades, sólo sirven 700 (35 por ciento), muchas de ellas en malas condiciones mecánicas, lo que obstaculiza que los elementos de la policía estatal puedan salir a sus labores.

Para colmo, la famosa promesa hecha por Yunes de combatir al crimen con los avances tecnológicos, se fue al caño de la más terrible corrupción. Los veracruzanos esperamos la evaluación que realiza el órgano de Fiscalización Superior al supuesto sistema de videovigilancia que nunca llegó a funcionar siquiera al 50 por ciento, gracias a la contratación de una empresa que había sido deshabilitada por las autoridades federales por fraude e incumplimiento.

Ahora sabemos, por otra parte, que en una licitación hecha por el gobierno yunista para la adquisición de 10 drones para la SSP, la ganó una empresa de Monterrey, Telecomunicaciones y Servicios del Norte, SA de CV, ligada al hijo de Manuel Muñoz Gánem, número dos en el gobierno anterior, cuyo costo fue de 2 millones 354 mil 516 pesos, lo que significó un sobreprecio hasta de 40 por ciento.

De acuerdo con el contrato SSP-UA-035/17, firmado por el entonces director de la Unidad Administrativa de la SSP, Juan Carlos Saldaña Morán, para la adquisición de equipo especializado aéreo (drones), se acordó la compra de tres drones DJI Inspire 2, a un precio de 126 mil 877 pesos, cuando el precio máximo en el mercado era de 91 mil pesos; además, una cámara DJI Zenmuse XT B19SR, por 330 mil 528 pesos, cuando el precio máximo era de 249 mil pesos; por último, seis drones DJI Inspire 1 v2, con un precio unitario de 78 mil pesos, cuando adquirido sin ganancia para el adquiriente era de 59 mil pesos.

Al cuestionarle al gobernador García Jiménez sobre si estaba fallando la estrategia contra la violencia criminal, dijo que no había fallado, “lo que pasa es que los delincuentes se dan cuenta que el fiscal no los investiga y, entonces, actúan con más intensidad; esto es culpa del fiscal, mientras el fiscal siga fallando es un problema, le exijo que entregue las carpetas concluidas de quienes son los responsables de los asesinato”.

Hasta cuentos chinos lanza Winckler

Lo más reciente en la batalla mediática de Yunes-Winckler contra el gobierno de Morena ha sido basada en la deformación de hechos delictivos ocurridos fuera de Veracruz. Aunque durante el yunato (al igual que en el duartismo) se buscó deshacerse de casos criminales ubicándolos en otras entidades, ahora el cartel del estero hace todo lo contrario.

Para desacreditar aún más a las autoridades policiacas bajo el mando del gobierno morenista, Jorge Winckler se aventó la puntada de confirmar el secuestro de un elemento de la Policía Federal en la zona de Acultzingo, en Veracruz. Ha debido salir el gobernador Cuitláhuac García a desmentirlo: El oficial no era veracruzano y el video que se difundió del secuestro en redes sociales es falso, además de que el hecho ocurrió en otro estado.

En efecto, el fin de semana se difundió un video donde se observa el secuestro del subinspector de la Policía Federal, presuntamente ocurrido en la carretera Acultzingo-Ciudad Mendoza. Aunque el fiscal Jorge Winckler Ortiz, en conferencia de prensa, aclaró que el video que circulaba era falso, señaló que la mesa de seguridad estatal había tomado conocimiento del hecho y, por petición de la familia, el secuestro estaba siendo investigado por el gobierno federal.

El gobernador desmintió los hechos y explicó: “Se habla del secuestro de un policía federal, se sabe que eso no sucedió aquí, el policía no era de Veracruz, y el secuestro no pasó aquí”.

Horas después, la Secretaría de Seguridad Pública emitió un comunicado donde informó que se localizó con vida al agente de la policía federal en la carretera Acultzingo-Ciudad Mendoza, a la altura de la localidad Taza de Agua Ojo Zarco, pero que el policía es originario de Oaxaca y fue privado de su libertad en Puebla.

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“Hago un llamado de alerta a los mexicanos para que evitemos la militarización del país NoALaMilitarización”. Manuel Bartlett @ManuelBartlett 17/01/17

Postergan sesión sobre juicios políticos contra Winckler

Para colmo, una nueva postergación ha sufrido la definición sobre si se abren o no los dos juicios políticos que penden sobre la cabeza del Fiscal Jorge Winckler Ortiz en la Legislatura local.

Aunque el secretario de la Mesa Directiva, el diputado priista Jorge Moreno Salinas, señaló que la reanudación de la sesión extraordinaria podría darse este jueves 21, el secretario general del Congreso, Domingo Bahena Corbalá, notificó a los diputados que la sesión prevista para este martes 19, a las cinco de la tarde, se llevará [o podría llevarse] a cabo a la misma hora pero del miércoles 27 de febrero, retrasando una semana más para abordar este espinoso asunto.

Héctor Yunes, un político marrullero

Ni lo que le ha de haber costado su viaje a la Ciudad de México para tomar protesta como diputado federal va a recuperar Edmundo Martínez Zaleta, alias El Muerto, exalcalde de Papantla, pues todo parece indicar que suplirá al inefable Héctor Yunes Landa por menos de una semana.

Ya le tocó la experiencia a la actual diputada local Érika Ayala, quien suplió a Héctor Yunes de febrero a agosto de 2016 en el Senado de la República mientras aquel hacía campaña por la Gubernatura de Veracruz, en que perdió con su primo panista, Miguel Ángel Yunes Linares.

La diferencia es que Martínez Zaleta no tendrá, aparentemente, ni tiempo para agenciarse un mes de la abundante dieta legislativa si, como todo apunta, quien ha sido de todo (desde diputado local y federal hasta senador y candidato priista a la gubernatura de Veracruz) solo se despega del Congreso de la Unión por los escasos tres días para los que pidió su licencia.

Dos cosas folclóricas (propias del rancio y ya despreciable priismo) destacan de este hecho absolutamente banal: por un lado, el despliegue mediático hecho por Yunes Landa, sin que se le atribuyera la especie, de un torpe calambre contra el gobernador Cuitláhuac García y, particularmente, contra su secretario de Gobierno, Eric Cisneros, señalando que la licencia obedecía a su segura incorporación a un gabinete al que, salvo que las estrellas colapsaran, podría tener acceso.

Por otro, triste ciertamente, el boato con que el exdirector de Tránsito en el municipio de Xalapa y exsubsecretario de Seguridad Pública en la entidad, Edmundo Martínez Zaleta, rindió protesta en el Palacio Legislativo de San Lázaro, rodeado de personajes nada propiciatorios, como la diputada Anilú Ingram, y el abrazo de la exgobernadora de Yucatán y expresidenta nacional del PRI, Dulce María Sauri Riancho… y todo para estar solo esta semana calentando la curul, porque el viernes 22 regresa Héctor.

Eso no le impidió utilizar políticamente su brevísima ausencia de un Congreso en una bancada verdaderamente ridícula por su tamaño, apenas 13 elementos, que en un partido al que nos habíamos acostumbrado a ver como la aplastante mayoría, no pasa de ser una anécdota.

En efecto, 24 horas antes de que Yunes Landa pidiera licencia, ya corrían ríos de tinta para explicar su salida por motivos tan lejanos como la distancia que media entre la Tierra y el Sol; según comentarios que inundaron varios medios digitales, el choleño venía directamente a ocupar, fuera la silla de Eric Cisneros (a quien lo traen como costal de box) o depender de él en una subsecretaría, lo que muchos consideraron como su inmediato control de la política interna de la entidad; lo menos que se dijo es que vendría a impulsar su asociación política Alianza Generacional, para convertirla en partido político estatal.

Nada de eso, solo ha pedido licencia, según versiones más certeras, para someterse a un procedimiento quirúrgico, y no de los complicados y riesgosos precisamente.

En el comunicado emitido muchas horas después, Yunes Landa explica que “hace unas semanas fue sometido a una intervención quirúrgica debido al rompimiento de un tendón de la mano derecha y otro tipo de complicaciones. Sin embargo, la falta del reposo postoperatorio que le fue prescrito, provocó que la lesión se le complicara y tuviera que regresar el día de ayer al quirófano”.

Y todavía desmiente a quienes, aparentemente con su indicación, esparcieron rumores tan increíbles: “Sé que esta decisión que adopté por prescripción medica (sic) ha provocado variados análisis, rumores, y pronósticos por lo que me siento obligado a precisar que el exclusivo motivo de mi solicitud de licencia temporal es esta y ninguna otra”.

¡La mano del muerto! ¡Vaya juego de quienes extrañan las ya inexistentes marquesinas!

Comentarios: belin.alvaro@nullgmail.com

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