Veracruz, Ver.- El titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Román Meyer Falcón, reconoció que el rescate del campo mexicano representará un trabajo de varias décadas, pues implicará revertir las políticas públicas mediante las cuales se intentó sepultar al agro nacional.

Durante la conmemoración del 104 aniversario de la Promulgación de la Ley Agraria, que se celebró en esta ciudad, el funcionario federal aseguró que se impulsarán políticas públicas en el corto y en el mediano plazo para que el campo mexicano deje de ser cuna de la marginación y de la desesperanza.

“La recuperación del campo será un trabajo de varias décadas, sabemos que la transformación no será de la noche a la mañana, estamos revirtiendo aquellas políticas neoliberales que quisieron matar al campo mexicano, pero no pudieron; el reto es grande (…) Edificaremos en el corto y largo plazo las políticas necesarias para que el campo deje de ser la cuna de la marginación y la desesperanza y se convierta en un espacio digno de vivir”, expuso.

Ante el gobernador Cuitláhuac García, líderes campesinos, legisladores federales y locales, Román Meyer Falcón afirmó que se dejarán atrás las políticas clientelares y se construirá una relación de diálogo con el sector campesino.

Meyer Falcón indicó que el campo se encuentra sumido en una injusticia social a 104 de la Promulgación de la Ley Agraria.

“Hoy iniciamos una nueva etapa histórica del país, queremos resarcir la deuda histórica con el campo, dejemos atrás el clientelismo y apostemos por la cooperación, construyamos espacios de diálogo y no de monólogos; apostemos por una relación cercana, que todos los campesinos y comunidades indígenas participen activamente en la creación de la agenda agraria nacional”, insistió.

Por último,  refirió que los ejidos y las comunidades ocupan más del 50 por ciento del territorio nacional, pero advirtió que los núcleos agrarios enfrentan amenazas constantes por el despojo de sus territorio debido a intereses privados, la pobreza y el desgaste de los recursos naturales, lo que, en algunos casos, provocó la venta de tierras a corporaciones que se aprovechan de la situación de los campesinos.

José Juan García/Avc