Los órganos internos de control son la primera instancia que debe detectar las irregularidades financieras en el manejo de los recursos públicos tanto en los entes estatales, como municipales y órganos autónomos, afirmó el Auditor General del Estado, Lorenzo Antonio Portilla Vásquez.
El funcionario del Orfis detalló que se han hecho observaciones ante la pasividad de dichos órganos, y comentó que es posible fincar responsabilidad a los titulares al no observar las irregularidades.
“Por parte del Orfis como de los actuales funcionarios se puede actuar, la ley de Responsabilidad contempla sanciones administrativas por el incumplimiento de un deber legal”.
El Auditor General comentó que no todo se hace al margen de la ley, y quien incurre en esas acciones puede ser sancionado. “En el informe de resultado de la Cuenta Pública del 2017 señalamos que se deben reforzar los órganos de control y que deben actuar previniendo”.
Lorenzo Portilla explicó que actualmente se está realizando una investigación contra algunos despachos contables que los apoyan en las auditorías por algunas irregularidades cometidas, al no aplicar el procedimiento administrativo que se pidió.
“Lo que pretendemos nosotros es que los trabajos técnicos de los despachos sea un trabajo profesional, como debe ser, apegado a la legalidad y que rinda frutos de manera preventiva, y que, si encuentran actos fuera de la ley, que los señalen”.
Al concluir la revisión, de comprobarse una irregularidad, se les negará el refrendo en el padrón de despachos contables, incluso, se les podrían fincar responsabilidad penal.
AVC/Isabel Ortega