Amanda D. Melin, investigadora de la Universidad de Calgary, Canadá, sostiene que dentro de la comunidad de los monos capuchinos hay integrantes con diferentes características, lo que ha permitido tener tareas específicas que disminuyen la competencia al interior.

La académica impartió la conferencia intitulada “The sensory ecology of fruit selection by wild Costa Rican capuchin monkeys”, en el 5º Simposio Internacional de Neuroetología, organizado por el Instituto de Neuroetología de la Universidad Veracruzana (UV).

En entrevista, Amanda Melin dijo que durante 15 años se ha dedicado a la investigación de los monos capuchinos en Costa Rica, específicamente en los monos que tienen visión monocromática, los que ven sólo los colores rojo y verde y los que lo hacen en rojo, amarillo y verde.

“Me interesé por estudiar cuáles son los factores responsables de porqué en una misma población hay machos que no pueden ver la diferencia entre los colores, y lo mismo pasa en las hembras.”

Primero pensó que se debía a un factor de adaptación, pero encontró que los monos que perciben colores, identifican las frutas y las comen más rápido.

Mientras que aquellos con visión monocromática distinguen más rápido a los insectos, que representan el 50 por ciento de su dieta, son especies muy activas e inteligentes, de ahí que necesiten grandes cantidades de comida.

“Ambos tienen diferentes características que les permiten comer diversos alimentos; además, esto reduce la competencia entre ellos porque cada uno tiene tareas específicas dentro del grupo. Quizá por ello persisten.”

Amanda D. Melin es bióloga con especialidad en antropología y ecóloga evolutiva, se interesa en las relaciones entre la ecología sensorial y alimentaria, además de su rol en la evolución y adaptación primates humanos y no humanos.

Ha publicado 45 trabajos de investigación en revistas arbitradas internacionales, como Animal Behaviour, International Journal of Primatology, Molecular Biology and Evolution, entre otras, además de ocho capítulos de libros; asimismo, ha impartido 95 conferencias nacionales e internacionales.

Actualmente es investigadora de los departamentos de Arqueología y Antropología y de Medicina Genética de la Universidad de Calgary, Canadá.

Paola Cortés Pérez/Prensa UV