La cancelación del nuevo aeropuerto en Texcoco manda una señal negativa y desalienta la inversión, dijo este miércoles Jaime Reusche, analista soberano de Moody’s.

La agencia anunció que mantiene la calificación de México en A3, que se ubica en el tercer escalón en una escala de nueve niveles, con perspectiva a estable.

El analista aclaró que por el momento no hay un impacto directo en la calificación soberana de México tras la decisión del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, de suspender la obra, por lo que no la modifican, y tampoco tocan la perspectiva.

El lunes, López Obrador anunció que, en su lugar, construirá dos pistas en la base militar de Santa Lucía, trabajo que irá acompañado de la remodelación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y el de Toluca.

Sin embargo, el analista advirtió que la suspensión del proyecto, calificada como negativa, puede incentivar en el mediano plazo interrupciones en las inversiones y frenar la marcha de la economía.

Reusche también destacó que la depreciación del peso y la presión que enfrenta no tendrán un impacto en los niveles de la deuda, por lo que no existe una preocupación ‘fuerte’ a menos que se registre un ‘shock’ del dólar.

En todo caso, Reusche aseguró que para que exista un cambio en la calificación de la deuda soberana de México debe haber un impacto en las finanzas públicas del país, por lo que la agencia vigilará de cerca las cuentas fiscales de la próxima administración, por lo menos seis meses después de que López Obrador asuma la Presidencia.

“Sí vemos al soberano mexicano con altos niveles de solvencia. No veríamos un cambio brusco en la calificación a menos que exista un shock en las cuentas fiscales”, remarcó.

El analista de Moody’s calificó como positivo que el equipo de transición busque tranquilizar a los inversionistas.

Alfonso Romo, próximo jefe de la oficina de la Presidencia, anunció el martes la creación de una comisión negociadora para dialogar con los empresarios que tengan contratos en el nuevo aeropuerto.

Sin embargo, puntualizó que aún existe incertidumbre en torno al futuro de la política pública de López Obrador.

“La señal es que nos deja bastante incertidumbre en cuanto a la dirección de las políticas públicas (…) por lo que estaremos atentos a los pronunciamientos, principalmente en temas fiscales y económicos”, aseguró.

La agencia Fitch Ratings anunció este miércoles que cambió la perspectiva para México de estable a negativa, citando el deterioro en el balance de riesgos del perfil crediticio del país.

Con información de El Financiero