Veracruz, Ver.- El desbordamiento del río Tesechoacán provocó afectaciones en 19 comunidades del municipio de Isla, dejando como saldo un estimado de cinco mil personas damnificadas.

Además, miles de hectáreas dedicadas a cultivos como el maíz y la caña de azúcar resultaron siniestradas por el incremento del nivel del afluente, por lo que se pedirá el apoyo de las dependencias agropecuarias para los productores.

De acuerdo con reportes municipales, la crecida del río Tesechoacán cubrió viviendas de comunidades como El Garro, El Corte, Viloria Viejo, Cujuliapan, Las Hojas, Las Pitas, El Nanche, El Coco, Los Potrerillos, El Tesoro, Agua Fría, El Marcial, Los Mosquitos, Las Garzas, San Luis, entre otras.

Al conocerse la dimensión de la contingencia, las autoridades municipales implementaron un plan de evacuación de las familias cuyas viviendas se encuentran asentadas en partes bajas. Las familias que aceptaron dejar sus viviendas se trasladaron a la Casa de Cultura del municipio, la cual se habilitó como albergue temporal.

Aunque hubo familias que se negaron a ser trasladadas por temor a perder sus bienes.

A partir de que los caminos fueron cubiertos por la crecida del río, se utilizaron lanchas para llevar apoyos alimenticios, agua e incluso colchonetas a las familias damnificadas.

El alcalde Fernando Molina Landa informó que el Gobierno del Estado envió despensas a Isla el día jueves, iniciando su reparto en comunidades como Cujuliapan (El Guayabo) y El Mosquito.

Además, dijo que la contingencia hidrometeorológica resultó sorpresiva, pues no se esperaba un crecimiento del río tan grande.

No obstante, la primera autoridad de Isla aseguró que no se registraron desgracias personales, pero sí pérdidas cuantiosas tanto en viviendas como en los cultivos.

Por último, se dio a conocer que se habilitó un centro de acopio en los bajos del palacio municipal para apoyar a los damnificados, por lo que los interesados en colaborar pueden entregar: alimentos no perecederos, comida preparada, agua embotellada, cobijas, colchonetas, ropa en buen estado y medicamentos no caducos.

José Juan García/Avc