Algo es públicamente notorio: “Éste es el primer Gobierno en el que se trabaja correctamente en materia de obra pública y la comunidad xalapeña se está dando cuenta del cambio. Se acabaron los moches, por primera vez se combate la corrupción y se privilegia la transparencia, la rendición de cuentas y se considera a todos los constructores”, afirmó el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Xalapa, Carlos Nachón Aguirre.
Lo anterior, durante la reunión que sostuvieron en la Sala del Cabildo más de 100 contratistas integrados al padrón de proveedores, con el presidente municipal Hipólito Rodríguez Herrero, regidores y los directores de Obras Públicas y de Participación Ciudadana, para expresar sus inquietudes, problemas y propuestas de mejora de los procesos administrativos.
“Dentro del Colegio criticamos algunas cosas, hacemos sugerencias en busca de la transparencia. ¿Qué nos corresponde hacer ahora a los funcionarios, contratistas y a los encargados?: ponernos de acuerdo. A veces queremos ser más papistas que el Papa, interpretamos la ley a nuestra conveniencia para justificar algún retraso administrativo o simplemente porque no entregamos nuestros documentos”, añadió Carlos Nachón.
Señaló que hay nuevas reglas, y muy claras, en la Dirección de Obras Públicas, por lo que como constructores respaldan la nueva dinámica de la administración municipal: “Nos sumamos al proyecto, a las reuniones de trabajo y debemos comprometernos ambas partes, porque la corrupción la hacemos todos, tanto ciudadanos como funcionarios”.
La presidenta del Consejo de Planeación para el Desarrollo Municipal de Xalapa (Coplademun), María Esther Mandujano García, señaló que a través de este organismo y la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción (AMIC) se constata la voluntad del Gobierno Municipal por erradicar la corrupción: “La mayoría de las personas con las que trabajo tienen la misma percepción. Éste es el camino que buscamos recorrer”.
Dijo que para mejorar se debe ser crítico y autocrítico, tanto en los procedimientos internos de la Dirección de Obras Públicas como en los procesos administrativos, por lo que propuso efectuar una mesa de trabajo periódica para revisar estos temas con representantes de colegios y asociaciones: “Hay una enorme disposición y vemos grandes avances. Que estemos todos aquí lo constata”.
La empresaria Guadalupe Soriano señaló que pese a las dificultades que ha enfrentado la administración, la nueva forma de hacer las cosas es visible y palpable: “Como personas morales nos damos cuenta de la realidad, del trabajo que se hace. Pese a recibir un municipio lastimado se trabaja arduamente, de forma honesta y transparente, y eso ya se reconoce en las colonias y comunidades.
“Es la primera vez que tengo la oportunidad de trabajar con el municipio y aquí no hay moches. Es normal e inevitable el comienzo difícil de una nueva administración, así que agradecemos la apertura para platicar y que tomen en cuenta nuestras opiniones y observaciones, que nos hayan recibido a todos; creo que esto nunca se había dado”, agregó.
Finalmente, Manuel Martínez celebró la nueva manera de trabajar y de asignar la obra, pues incluir a todos los empresarios, independientemente de que estén agrupados en alguna asociación o cámara, es motivo de aplauso: “Todo cambio, transformación, lleva un proceso; hay que sumarnos y entre todos erradicar la corrupción y generar obra de calidad para los ciudadanos”.