La síndica única del ayuntamiento de Úrsulo Galván, Norma Alicia Herrera Mejía; el regidor primero, Andrés Salas Contreras; el regidor segundo, Eugenio Mendoza y la regidora tercera, Mitzhy Pahola Morales Alarcón, se defendieron de las acusaciones del presidente municipal de un presunto desvío de ocho millones de pesos y aseguraron que en ningún momento lo han agredido.

Acusaron que el presidente municipal, Enrique Benítez Ávila, gasta 50 mil pesos a la quincena en el pago del salario de tres asesores y exige que se contraten dos más, y el costo ascendería a 90 mil pesos cada dos semanas.

Los regidores aclararon que las acusaciones del alcalde de que ellos lo ofendieron verbalmente es «totalmente falso, ya que siempre nos hemos dirigido en el marco de respeto y somos nosotros los que tememos por nuestra seguridad. Creemos que la seguridad que él pidió, solo ha servido para intimidar al cuerpo edilicio y a los empleados del ayuntamiento».

Refirieron que el presidente municipal está enfermo de diabetes y recibe el tratamiento de hemodiálisis tres veces por semana y el ayuntamiento cubre los gastos.

Explicaron que el alcalde cree que los regidores y la síndica tienen intenciones de solicitarle al congreso local que lo destituyan, sin embargo eso no es lo que piden.

Los regidores comentaron que si hay gobernabilidad en el municipio y la realización de obras públicas, a pesar de que el alcalde sólo va dos horas al palacio, una o dos veces por semana

«Nosotros estamos dando el frente, hemos resuelto la problemática de laudos, necesidades de la gente y lo pueden constatar con los ciudadanos, son seis obras las que se están haciendo este año.

Verónica Huerta/Avc