Oh, la ciencia. Hay una investigación fundamentada para cada ocasión. Tanto para comprobar que esa pantalla de tu smartphone te está cegando; como para cuestionar la inteligencia de aquella persona de carácter explosivo que no se lleva bien contigo (ni con nadie).

Resulta que un grupo de investigadores de la Universidad de Australia Occidental (UWA) y la Universidad de Varsovia en Polonia; acaban de publicar los resultados de su último proyecto. Y los resultados no son alentadores para las personas enojonas: su inteligencia tienden a sobrestimarla.

El documento del proyecto, disponible en la última edición de Intelligence (Elsevier), comprueba que existe una relación directa entre las personas que se enojan fácilmente y la percepción de su propia inteligencia.

Para lograrlo centraron todo su proyecto en la ira, el narcicismo y su balance para lograr un estado de equilibrio emocional. De modo que reunieron a un grupo de estudiantes, realizaron una serie de entrevistas; y los sometieron a una serie de pruebas para concluir lo siguiente:

El rasgo de la ira, en algunos casos, puede ser consecuencia de una estabilidad emocional menor, como la ansiedad.

La ansiedad, sin embargo, no alimenta estas explosiones de frustración, malacrianza y enfado. Parece que el factor clave es el narcisismo.

Es por esa mezcla de factores que las personas iracundas tienden a valorar mejor su inteligencia. Así que ya lo saben. Si conocen a alguien narcisista es posible que en el futuro no muy lejano se vuelve también alguien iracundo.

Con información de FayerWayer