El viernes pasado, el diario Reforma publicó como su nota principal que el actual Secretario de Seguridad Pública en el Estado de Veracruz, Jaime Téllez Marie, es investigado por la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) por presuntamente tener nexos con una mujer que actuaría como operadora de un grupo delictivo y quien actualmente se encuentra presa.

La publicación vino a ser el colofón de una semana de infierno para la policía estatal. Al supuesto enfrentamiento de policías con delincuentes en Río Blanco –que dejó como saldo tres personas muertas, entre ellas dos hermanas menores de edad-, se sumó un violento choque entre policías, supuestos delincuentes y pobladores de Acultzingo, para cerrar la semana con el señalamiento de la PGR al titular de la Secretaría de Seguridad Pública veracruzana.

La inseguridad, la misma que se había ofrecido resolver en seis meses, ha puesto contra las cuerdas una vez más al gobierno estatal. Las sospechas sobre la actuación criminal de la policía en el caso Río Blanco cobraron fuerza luego de que ocho policías fueron vinculados a proceso, acusados de desaparición forzada de un joven en la ciudad de Córdoba el 21 de febrero pasado. La zona centro del estado se ha convertido en un polvorín para la policía y en un infierno para sus habitantes.

En Río Blanco, el sábado 10 de marzo, las hermanadas Nefertiti y Grecia Camacho –de 14 y 16 años, respectivamente-, murieron a manos de la policía, tras un enfrentamiento entre un supuesto comando armado y elementos de la policía. El escándalo se desató tras la difusión de una fotografía difundida en redes sociales donde se muestra a una de las jóvenes aún con vida y sin armas junto a la policía; a nivel nacional se aseguró que se habría tratado de una ejecución extrajudicial.

Sin embargo, para el Gobernador del Estado y el Fiscal General de Justicia, las dos menores eran un par de criminales que colaboraban con un grupo de la delincuencia organizada; lanzaron una ofensiva mediática para señalar a las víctimas a partir de su apariencia, tatuajes y la supuesta declaración de familiares. Algunos medios han dado cuenta que el perfil de las redes sociales de una de ellas, en nada corresponde a la narrativa oficial.

Apenas unos días después, la noche del jueves pasado, se registró un violento enfrentamiento en el municipio de Acultzingo entre policías estatales, presuntos delincuentes y habitantes del lugar. La población rechazó la presencia de los uniformados. Por horas, la ciudad fue un estado de sitio, y aunque en principio se habló que habría elementos de seguridad heridos y fallecidos, la versión oficial habla sólo de un civil muerto.

Respecto al reportaje de Reforma, este señala que de acuerdo a la indagatoria a la que tuvo acceso, Jaime Téllez presuntamente tendría una relación estrecha con Guadalupe H.H –la que el mismo viernes confirmaría el propio Gobernador-, quien tendría la función de “notificadora” y “enlace” de un grupo delincuencial que opera en el sur de Veracruz y el norte de Tabasco. Esta información se obtuvo luego de que la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada intervino llamadas con autorización judicial y de esta manera descubrió que Guadalupe H.H. tenía comunicación con el titular de la SSP en la entidad.

Lo grave del asunto es que esta comunicación se habría dado precisamente mientras ella negociaba el pago de dos millones de pesos como rescate de una persona privada de su libertad, misma que posteriormente fue asesinada por sus captores.

El gobernador Miguel Ángel Yunes afirmó que su secretario de Seguridad Pública, Jaime Téllez Marié, “no fue citado (por la SEIDO) porque se acreditó plenamente que el secretario sirvió para obtener información, fue una guía para obtener información para detener a uno de los jefes más importantes de la delincuencia en Veracruz, apodado “El H”, Hernán Hernández, alias “El H” y que la persona que proporcionó información fue precisamente esa señora (Guadalupe H.H.)”.

En todo caso, la indiscreción del Gobernador –motivada por la urgente necesidad de salir en defensa de su secretario de Seguridad Pública- podría significar una sentencia de muerte para la informante, quien aún se encuentra presa.

Jaime Téllez Marié también confirmó lo publicado, pero justificó que se trataba de una investigación de la SEIDO, en la que compareció a declarar, lo cual ayudó a detener a presuntos delincuentes. Dijo que la revelación no le agravia porque ayudó a la captura de Guadalupe H.H. quien era su informante, pero después descubrió que su información no era para colaborar con las autoridades sino que formaba parte de un grupo delincuencial. ¿De verdad el Secretario de Seguridad Pública no sabía quién era su interlocutora? ¡Plop!

Días de verdadero infierno para la Secretaría de Seguridad Pública. A ver si a nuestro Secretario no le vuelve a dar un patatus… porque de relevo, mejor ni hablamos.

Las del estribo…

  1. Ya entrada la noche del domingo aun no se conocían a detalle las listas de candidatos plurinominales al Senado y a la Cámara de Diputados. Sólo se sabía con plena certeza que el grupo del Presidente Peña y el candidato Meade se habían llevado las posiciones de privilegio. Y los que no quieren a Ochoa Reza, ahora lo tendrán que aguantar en la Cámara baja… ¿como su coordinador?
  2. Los actos de violencia registrados en la víspera de la elección extraordinaria de este domingo en los municipios de Sayula de Alemán, Emiliano Zapata y Camarón podrían ser un mal augurio de lo que podría suceder en julio. Aunque la pasión se desata en las municipales, lo que está en juego para el estado y el país es mucho mayor. Esperemos que nadie intente ganar a la mala…