México, 23 feb (Xinhua) — México moderó en 2017 el déficit en su cuenta corriente de la balanza de pagos gracias al fortalecimiento de la economía global y a una moneda mexicana en niveles depreciados, informó hoy viernes el central Banco de México (Banxico).

El déficit de la cuenta corriente de México se redujo a un 1,6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2017, desde el 2,1 por ciento del PIB del año previo, explicó la entidad monetaria en su informe de la Balanza de Pagos de 2017.

Sus equivalentes en dólares son 18.831 millones de dólares para 2017, contra los 22.828 millones de dólares del año previo, señaló Banxico.

La entidad monetaria dijo que las exportaciones manufactureras, sobre todo las automotrices que van en una mayoría a Estados Unidos, continuaron mostrando una recuperación en 2017.

«En efecto, el menor déficit en 2017 respecto a 2016 reflejó, principalmente, el mayor saldo de la balanza de productos no petroleros, el cual incluso registró un superávit en 2017, lo que se compara con los déficits observados en cada año entre 1996 y 2016», precisó la institución.

La entidad monetaria agregó que el flujo de remesas de los mexicanos que viven en el exterior y las divisas generadas por turismo también ayudaron en la mejora de las cuentas mexicanas.

Banxico dijo que el mayor dinamismo de la actividad económica mundial, en particular el de la economía de Estados Unidos, el principal socio de negocios de México, se ha reflejado en una revisión al alza de los pronósticos a nivel global.

No obstante, la entidad monetaria expresó que hacia adelante prevalecen riesgos económicos y geopolíticos, como la posibilidad de una normalización de la política monetaria más rápido a lo anticipado en las economías avanzadas.

Pese a ello, dijo, la economía mexicana «continuó captando recursos a través de la cuenta financiera, principalmente por concepto de inversión directa y de cartera».

La entidad monetaria señaló que no pueden descartarse nuevos episodios de volatilidad en los mercados financieros debido a un endurecimiento de las condiciones financieras globales.

«Al respecto, recientemente los mercados financieros globales parecerían estar respondiendo a este riesgo, ante un panorama de mayores presiones inflacionarias», alertó.

En su aviso más reciente de política monetaria, el 8 de febrero, el banco central mexicano dijo que la inflación local podría alcanzar el objetivo del 3,0 por ciento en el primer trimestre de 2019.

La inflación interanual de México se desaceleró a un 5,45 por ciento en la primera mitad de febrero, informó el jueves el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).