Berlín, 22 feb (Xinhua) — Investigadores de la Fiscalía de Múnich llevaron a cabo hoy inspecciones en los apartamentos y en una oficina de cinco ex empleados de Audi.

Esta es la tercera ocasión desde marzo de 2017 que los fiscales del estado de Baviera indagan al fabricante de coches de lujo con sede en Ingolstadt en relación con el escándalo «dieselgate». Dos de los sospechosos afectados en la más reciente redada habían sido altos ejecutivos de Audi, confirmó un portavoz de la oficina de la Fiscalía Munich.

Hasta ahora, los investigadores han identificado a 17 sospechosos que podrían estar involucrados en la instalación de software ilegal para falsificar los niveles de emisiones de dióxido de nitrógeno de vehículos diésel.

La oficina del fiscal señaló que por lo menos 210.000 carros afectados por esa práctica de «trampa de emisiones» fueron vendidos en Estados Unidos y Europa desde 2009. Por ello, Audi enfrenta cargos de fraude y publicidad ilícita con base en la legislación alemana.

En respuesta a las noticias de hoy, un vocero de Audi subrayó que no se han llevado a cabo revisiones judiciales en ninguna de las instalaciones corporativas.

Actualmente sólo hay un sospechoso bajo custodia de la policía en la investigación «dieselgate» contra Audi. El que fuera director de la división de desarrollo de motores del fabricante de coches fue arrestado en septiembre de 2017.