Agua Dulce, Ver.- El cuerpo del niño de 13 años que fue asesinado en Agua Dulce fue entregado a la familia apenas por la noche del viernes, según los vecinos, sin embalsamar, además de que le cobraron a la familia 1500 pesos para realizar la necropsia de rigor y originalmente les estaban pidiendo 2500 pesos.
El Sindicato Petrolero de la Sección 22 donó la caja, pero la humilde familia debió cubrir el costo de los servicios funerarios y la necrocirugía, aunque al final ni siquiera les entregaron algún documento y eso impedía que pudiera ser enterrado.
La velación ocurrió en su casa de la colonia Díaz Ordaz, un cuarto hecho pies a cabeza de láminas roídas por el óxido, con ladrillos y palos en el techo para evitar que estas vuelen y apenas reforzado en algunas zonas con un recubrimiento de lonas usadas en campañas políticas.
El dolor al que se enfrentó esta familia apenas empezó con el hallazgo del cuerpo y se prolongó durante el fin de semana al enfrentarse con los trámites burocráticos de la Fiscalía General del Estado (FGE), una que para municipios como Agua Dulce debe auxiliarse de funerarias particulares para el levantamiento de los cuerpos, pues no poseen una morgue oficial.
Don Juan, de oficio pepenador, apenas obtiene un ingreso que raya la línea mínima de bienestar, es decir, que está sumergido en la pobreza.
Su hijo solía ayudarle limpiando terrenos, pero también vendiendo coco y malanga o palancas para tensar lazos de ropa.
Por tal motivo, los gastos que debieron afrontar por la muerte prematura de su hijo mayor les provocó una situación muy complicada, pues además tuvieron que trasladarse hasta otras ciudades para obtener los papeles necesarios para enterrarlo ante la negligencia de las autoridades.
“Ya el cuerpo estaba comenzando a oler, pues no estaba preparado”, cuenta una de las vecinas, que ayudó a la familia Moreno a moverse en la ciudad para pedir ayuda.
Mientras que la madre del niño tuvo que ir hasta Coatzacoalcos y Las Choapas, finalmente un grupo de ciudadanos ayudaron a contactar al juez del Registro Civil para que facilitara la documentación necesaria y así pudiera ser enterrado.
El apoyo de los vecinos de la colonia Díaz Ordaz fue fundamental para esta familia, quien vio en ellos una ayuda en un momento difícil, quizá, el más difícil que hayan enfrentado hasta la fecha.
Entre varios pobladores cooperaron y ayudaron acompañando a la familia a diferentes espacios hasta encontrar una solución al problema de la documentación para enterrar a Juan.
Fue hasta la noche del sábado, más de 36 horas después de que fue encontrado muerto, cuando el cuerpo del niño finalmente pudo ser depositado en su última morada, en el panteón de la colonia Díaz Ordaz, la misma zona en donde vivió casi toda su vida, en donde encontró la muerte y en donde ahora descansará eternamente, mientras que su familia se aferra a la esperanza de que las autoridades hagan justicia sobre este caso.
Cabe recordar que el pasado viernes, el joven y otro más de 17 años fueron agredidos con arma de fuego.
Presuntamente , los dos menores fueron llevados a la fuerza al interior de un rancho ubicado en la calle Camino a la Granja, en la colonia Díaz Ordaz, en donde fueron amarrados y baleados, aunque uno sobrevivió y logró huir cuando los captores se retiraron, tras fingir que estaba muerto, el joven menor fue asesinado en el lugar.
AVC/Noticias