El cineasta Guillermo del Toro rechazó que haya cometido plagio en su más reciente película «The shape of water», tal como señalaron algunos usuarios de redes sociales.

En entrevista para Excélsior, el director mexicano aseguró que se siente muy tranquilo respecto a su cinta y descartó que tan siquiera se haya inspirado en el cortometraje universitario «The space between us».

«Estoy muy tranquilo. Lo curioso para mí es que es un asunto que ya se discutió el año pasado, ya lo contestamos y que vuelve a salir ahora. Tengo 25 años de carrera y soy infinitamente transparente, y de hecho celebro las influencias que tengo y cómo se transforman cuando las aplico a mi cine, pero este no es el caso», declaró Del Toro.

Explicó que la idea de la película surgió tras leer el libro que coescribió Daniel Kraus, «Trollhunters», en diciembre de 2011, por lo que empezó a hacer los trámites correspondientes para realizar la cinta.

«La historia y los diseños se trabajaron de 2012 a 2014 para buscar financiamiento y básicamente se presentaron en la forma en que está la película, desde 2014. Las fechas, los calendarios, los contratos no son discutibles. La opinión de las coincidencias puede ser la que tú quieras, pero la premisa que se compra en el 2011 (por Fox) es: ‘Una mujer que hace el aseo en un laboratorio súper secreto del gobierno se encuentra con una criatura anfibia humanoide y le ayuda a escapar y se la lleva a casa'», sostuvo.

«Esa es la que compré abiertamente a Daniel Kraus en diciembre de 2011-enero de 2012. Está completamente documentado, entonces para mí ahí acaba la polémica».

Agregó los diseños, el motivo de las imágenes y los personajes, se inspiraron en una de las obsesiones de su infancia: la criatura del lago negro.

«Aparte de que exista la versión animada y de acción viva de Abe Sapiens («Hellboy») que hicimos, existen 25 años de ocuparme de este género de esta manera y creo que todos le debemos mucho a «El monstruo de la laguna negra», a la escuela, etc. Es tan sencillo como eso», concluyó.