Científicos de la Universidad Johns Hopkins (EU) han desarrollado una nueva tecnología para tomar muestras de sangre que permite detectar de forma temprana ocho tipos de cáncer y ayuda a identificar la ubicación del tumor.
Según los investigadores, el nuevo test, denominado CancerSEEK, tiene el potencial de cambiar la forma de la detección temprana de la enfermedad. La prueba busca mutaciones en 16 genes y evalúa los niveles de ocho proteínas generalmente liberadas en los pacientes con cáncer.
En el estudio, cuyos resultados fueron publicados en la revista Science, participaron mil 5 pacientes con cáncer ya prediagnosticado de ovarios, pulmón, hígado, colorrectal, páncreas, estómago, esófago y mama. La capacidad de la prueba para detectar la enfermedad fue exitosa en el 70 por ciento de los casos, y varió de un máximo del 98 por ciento para el cáncer de ovario a un mínimo del 33 por ciento para el cáncer de mama.
En el 83 por ciento de los casos, la prueba incluso pudo ayudar a localizar dónde exáctamente se estaba desarrollando el cáncer. Para cinco de estos tipos de cáncer (ovario, hígado, estómago, páncreas y esófago) hoy en día no hay pruebas de detección disponibles para personas de riesgo promedio.
UN GRAN PASO HACIA LA DETECCIÓN TEMPRANA
“El uso de una combinación de biomarcadores seleccionados para la detección temprana tiene el potencial de cambiar la forma en que detectamos el cáncer”, afirmó uno de los autores del estudio, el profesor Nickolas Papadopoulos.
Por su parte, el profesor asociado de oncología y bioestadística Cristian Tomasetti destacó que la prueba es única porque busca proteínas y genes mutados. “Una novedad de nuestro método es que combina la probabilidad de observar varias mutaciones de ADN junto con los niveles de varias proteínas para hacer el último aviso”, explicó.
Según las proyecciones de los especialistas, el uso de CancerSEEK permitirá detectar el cáncer antes de la aparición de los síntomas. El profesor de oncología Bert Vogelstein aseguró que la prueba no detecta todos los cánceres, pero sí identifica muchos tipos de cáncer que de otra manera no se detectarían, por lo que el nuevo test que podría ser “un gran paso hacia la detección temprana” de la enfermedad y, como resultado, salvar muchas vidas.
“Esta prueba representa el siguiente paso para cambiar el enfoque de la investigación del cáncer de la enfermedad en etapa tardía a la enfermedad temprana, lo que creo que será fundamental para reducir las muertes por cáncer a largo plazo”, señaló Vogelstein.
El nuevo análisis de sangre cuesta 500 dólares, pero antes de comenzar a vender la tecnología, los investigadores tienen la intención de realizar más investigaciones para probar su eficacia. Se espera que el método pueda detectar signos de desarrollo de cáncer antes de que lo determinen las tecnologías existentes.
Con información de RT