LONDRES, 11 ene (Xinhua) — Un intento del gobierno de Ecuador para solucionar el estancamiento respecto al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, quien se resguarda en la embajada ecuatoriana en Londres, sufrió hoy un revés.
El Ministerio de Relaciones Exteriores británico rechazó una solicitud para otorgar estatus diplomático a Assange, quien ha vivido en la embajada ecuatoriana desde 2012. Ese estatus le hubiera permitido salir de la embajada sin temor al arresto.
El programador de computadoras australiano y fundador de WikiLeaks no puede abandonar el edificio pues enfrentaría de inmediato el arresto de la policía.
Assange había sido buscado por acusaciones de acoso en Suecia, pero ese caso en su contra ya fue retirado. Originalmente buscó refugio en la embajada por temor a que, de ser enviado a Suecia, pudiera ser extraditado a Estados Unidos por el caso WikiLeaks.
La policía dice que será arrestado si abandona la embajada en Knightsbridge por no entregarse al tribunal británico en 2012. Assange ha estado ocultándose en la embajada desde entonces, de donde no ha podido salir en seis años.
Un vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores británico dijo que: «Ecuador sabe que la forma de resolver este asunto es que Assange abandone la embajada para que haga frente a la justicia».
La ministra de Relaciones Exteriores de Ecuador, María Fernanda Espinosa, que respondió a la decisión diciendo que «no se alcanzará ninguna solución sin la cooperación internacional y sin la cooperación de Reino Unido, que también ha mostrado interés en buscar una salida».
En Londres, los medios informan que el gobierno británico también se ha negado a garantizar que Assange no será extraditado a Estados Unidos, donde puede enfrentar cargos por su papel en la publicación de documentos clasificados.
Assange atrajo la atención internacional en 2010, cuando WikiLeaks publicó una serie de documentos sensibles filtrados. Eso provocó que el gobierno de Estados Unidos iniciara una investigación penal contra WikiLeaks y al mismo tiempo pidió ayuda a las naciones aliadas.
Trascendió que la estancia de Assange en la embajada de Ecuador ha costado a la Policía Metropolitana de Londres varios millones de dólares por la presencia permanente de la policía afuera de la embajada.