“Anaya es más peligroso que AMLO”:
Javier Lozano

A grito tendido para que lo pudiéramos oír, ya que en el auditorio de la sección 32 del SNTE las porras, la batucada, el animador y el murmullo hacían casi imposible escuchar, el politólogo tuxpeño Inocencio Yáñez Vicencio definió al precandidato del PRI a la gubernatura de Veracruz José Yunes Zorrilla:
“Es el único político honesto que queda en Veracruz, incluyendo a toda la clase política del estado, de todos los partidos; su ejemplar comportamiento como servidor público y representante popular, no se repite en nadie”.

En compañía del también politólogo Domingo Alberto Martínez Reséndiz, Yáñez Vicencio fue uno de los miles de asistentes al acto de registro de la precandidatura priista de Pepe Yunes ante la Comisión de Procesos Internos del CDE del PRI.

El entusiasmo del priismo por aportar su granito de arena para lograr el triunfo en las próximas elecciones es evidente, y es que saben que los miles de priistas que votaron para que Miguel Ángel Yunes Linares asumiera la gubernatura, lo hicieron en venganza por los agravios que Fidel Herrera Beltrán y, en mayor magnitud, Javier Duarte de Ochoa, les hicieron. Fidel creó una estructura paralela al PRI y con ella transitó los tiempos electorales de su sexenio, haciendo ganar a verdaderas rémoras que jamás habían estado en el partido así como a jóvenes amasias que se encargaron de destrozar a un partido que jamás valoraron. Puso, en un acto de desprecio al partido, a gente como Jorge Carvallo Delfín y Ricardo Landa Cano como presidentes del CDE, el más fuerte agravio para la militancia de ese partido. La cereza en el pastel fue el gordo Duarte, impuesto por la señora Borunda como candidato del PRI al gobierno, haciéndolo gobernador.

Por su parte, Javier Duarte, con su arrogancia e ignorancia de lo que es el trabajo político, pero movido por el principio que su mentor Fidel le inculcó de que “todo lo que con dinero se compra es barato”, invirtió recursos públicos en comprar alcaldías, diputaciones locales y federales, desdeñando a los miembros de la clase política veracruzana, quienes a lo largo de los años habían hecho ganar gubernaturas a desconocidos que les impusieron del centro, pero que por disciplina los hacían ganar. Esos priistas se cansaron del trato que les dieron y decidieron dar una lección a la pandilla de jóvenes maleantes que Fidel trajo y dejó para trascender en el poder en la persona de Javier, como hoy lo pretende hacer el panista Yunes Linares con su hijo.

Votaron por Yunes Linares porque lo conocían. Miguel Ángel Yunes, como el hombre poderoso del gobierno de Patricio Chirinos Calero, usó al PRI, su partido, para satisfacer sus caprichos pero, además, con un espíritu de venganza propio de su esencia, persiguió a todo lo que oliera a Gutiérrez Barrios y Dante Delgado, a quien encarceló con gusto, y luego trató de construir su candidatura al gobierno desde la dirigencia del PRI, lo que no pudo porque en un proceso electoral municipal los líderes de ese partido lo hicieron perder a fin de evitar que un hombre lleno de rencores y afanes de venganza, como él, llegara al gobierno para sembrar el terror.

Pero en el pasado proceso electoral, los priistas veracruzanos sabían que Yunes era el único capaz de encarcelar a los corruptos, comenzando por Javier Duarte, y como el gobierno federal también lo advirtió, antes de que ganara la elección pusieron al gordo fuera de su alcance, y en una simulación lo mantuvieron vacacionando en Guatemala para, luego, obligado por las presiones sociales, lo tuvieron que encarcelar y extraditar para ponerlo a buen recaudo, lejos del alcance de los panistas para quienes Duarte ha sido una bandera electoral.

El asunto es que el gobernante panista en vez de cumplir con las promesas que hizo y que lo llevaron al triunfo, de acabar con la inseguridad y perseguir a los corruptos para quitarles lo robado y devolverlo a las arcas, se olvidó de eso, dio la espalda al compromiso y se puso a trabajar en la sucesión, en la entronización de su hijo, usando las artimañas de siempre: la intimidación, la represión y la compra de conciencias, fórmula que no le funcionó cuando quiso ser gobernador por el PRI.

Y habiendo dilapidado su capital político pues la inseguridad no solo no terminó, ni disminuyó sino se ha incrementado de forma alarmante, los corruptos del pasado gozan de una extraña impunidad que él les ha dado (los que están en Pacho responden, cada uno, a venganzas personales) y la economía del Estado anda por los suelos, con un desempleo galopante y los comercios cerrando ante tanta inseguridad. Frente a esa realidad lo que viene es el retorno de la vieja clase política, la que construyó los cimientos para el desarrollo de Veracruz y permitieron, por mucho tiempo, una convivencia pacífica.

Por eso es que para Inocencio Yáñez Vicencio y para miles de veracruzanos, la candidatura de Pepe Yunes al gobierno, representa la esperanza de regresar a los tiempos del orden y la tranquilidad, de la aplicación correcta de la justicia, del respeto a las instituciones, del respeto a la voluntad democrática de las mayorías y de un desarrollo económico como nunca antes se ha tenido en la historia de Veracruz.

Ni en los mejores tiempos del priismo clientelar, de acarreos, habíamos presenciado un acto como el del pasado viernes en el auditorio de la sección 32 del SNTE.

El recinto no tuvo la capacidad suficiente para albergar a todos los asistentes, la explanada de la entrada estuvo llena de priistas que vieron a través de una pantalla gigante el evento, y todos, sin temor a equivocarnos, porque ahí estuvieron los espías del OPLE que mandó Gabriel Deantes, el más eficiente empleado electoral de Yunes Linares, a checar el costo de lo que pudiera ser un acarreo para meterlo en la cuenta de gastos del precandidato, nada de eso, puro priista convencido de la necesidad de revertir lo que en mala hora propiciaron con su voto… Nunca es tarde, de los arrepentidos es el reino del señor.

Va Yunes Linares por 100 mil votos

Según los cálculos electorales del PAN, en la conurbación Veracruz-Boca del Río podrían tener 100 mil votos a favor de Miguel Ángel Yunes Márquez, precandidato de la coalición PN-PRD-MC al Gobierno del Estado, con lo que sería suficiente para hacer diferencia con cualquiera de sus adversarios, el del PRI, José Yunes Zorrilla, o el de Morena, Cuitláhuac García Jiménez. Los panistas confían en este resultado porque, según ellos, el morenismo en esa zona no es importante y al priismo lo han desmantelado. Por ejemplo, en este momento cien empleados identificados con el PRI que laboran en la comuna del puerto de Veracruz, hoy en manos del PAN a través de Fernando Yunes Márquez, están siendo condicionados a permanecer en sus empleos a cambio de que se pasen al PAN y como no hay quien los defienda están emigrando al partido azul.

El Regidor II, el priista Marlon Ramírez Marín, a quien han acudido para solicitar apoyo, les dice que no le es posible intervenir porque es funcionario de la Comuna, y los manda con el presidente del PRI Municipal, Raúl Diez Diez, quien desde hace tiempo dejó el partido, no lo atiende porque argumenta que todos quieren ser generales y no hay tropa. Por otra parte Héctor Muñiz Lagunes, presidente del PRI Municipal de Boca del Río, hace lo mismo… nada. Ambas posiciones las tendrá que fortalecer el nuevo presidente del CDE, Américo Zúñiga Martínez, o seguirán siendo propiedad de la familia Yunes Linares-Márquez.

¿Que Moreno Brizuela decide en Morena?

La presencia en Veracruz del doctor Elías Miguel Moreno Brizuela como enviado del CEN de Morena para la selección de candidatos a los cargos de elección popular que se estarán definiendo en las urnas este año, ha provocado un gran malestar entre los morenistas fundadores de ese instituto político. Moreno Brizuela, un experredista que intentó ser candidato al gobierno como independiente, es hombre de todas las confianzas de Marcelo Ebrard y ahora que ha reaparecido al lado de su padrino político Andrés Manuel López Obrador, Ebrard hace sentir su fuerza comisionando representantes como Moreno Brizuela en los estados, con lo que genera inconformidad y malestar al interior de Morena. La candidatura de  Ana Miriam Ferráez por Morena, para la diputación por Xalapa rural, es resultado de negociaciones de Moreno Brizuela con los empresarios radiofónicos de Xalapa.

REFLEXIÓN

Qué bueno que el alcalde de Veracruz, Fernando Yunes Márquez, ayer por la mañana confirmó que se efectuaron disparos en las inmediaciones del Hospital Regional del ISSSTE alrededor las 5:30 horas. Explicó que supuestamente dos personas -una que esperaba el autobús y otra que se trasladaba en un auto compacto- se hicieron de palabras y una de ellas efectuó tres o cuatro disparos. Y decimos que fue bueno porque en las redes sociales, donde la gente se da vuelo para soltar los más perversos rumores, se decía que se trataba de un mensaje para Jaime Téllez Marié, Secretario de Seguridad Pública, ya que su esposa trabaja en ese nosocomio…. ¡Aguanten rumorólogos! Escríbanos a mrossete@nullyahoo.com.mx formatosiete@nullgmil.com www.formato7.com/columnistas