Los precandidatos han comunicado que llevan una vida como la de cualquier otro mexicano, o esa ha sido su intención. Ricardo Anaya rasca la jarana o el ukulele y hace refritos con sus fotos de dinosaurios; AMLO en una peluquería; Meade camina por la sala de llegada de vuelos comerciales, con su pase de abordar clase “turista”. No está mal querer transmitir que la vida de ellos no es distinta a la realidad, pero ¿y las propuestas para los militantes, o bien, para los mexicanos?
Lo único que ha estado en la agenda mediática es el Secretario de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, propuesta de López Obrador en caso de llegar a la silla presidencial. El intento es bueno, pero a la gente no se le puede engañar, es de dominio popular que en esta época serán lo más sencillos posibles, publicando en sus redes sociales para que llegue a todos los mexicanos, y más de uno pueda identificarse con ellos, o bien, reciban halagos, críticas.
Hay más que podrían hacer los precandidatos respecto a su imagen, no sólo fijarse en buscar ser lo más cotidiano posible, ninguno gasta un peso por un lujo extra. La forma de vestir de los precandidatos (candidatos), también comunican, dice un dicho “como te ven, te tratan”, de ser literales en la oración, se les trataría de forma distinta, sus discursos no van de la mano, con lo que transmiten en su forma de vestir.
Claudia Merino, especialista en imagen personal y empresarial, comenta que para gobernar un país, hay que ser y parecer. La imagen consiste en diversas ramas, de las cuales sólo analizando la vestimenta se pueden comentar los siguientes puntos: el tabasqueño se muestra tradicional, lo que hace bien es no ocultar sus canas, el uso de la guayabera hace que se muestre flexible. Lo que debería cambiar el ritmo que tiene al hablar.
Ricardo Anaya cuenta con una imagen pulcra y accesible, tiene cambiar su corte de cabello para evitar verse muy juvenil y le reste credibilidad. José Antonio Meade mantiene una imagen elegante, pero accesible a la vez, gracias a la falta de corbata y ropa casual, para mejorar debería ajustarse la ropa y un cambio de peinado, pues la forma en la que peina su cabello lo hace ver muy estructurado.
Esto sólo enfocándose en un punto de todo lo que abarca la imagen, para después pasar a las propuestas, coordinando con su presentación, y a lo último, difundir en redes sociales lo casuales que son en su vida, apesar de los millones que tienen… un poquito de coherencia, precandidatos.