Sophia, la robot social humanoide que hace dos años ‘prometió’ destruir a los humanos durante una entrevista hace dos años, parece haber cambiado de opinión y dice ahora que nos ‘ama’.
En una entrevista con Business Insider, Sophia fue preguntada por cuál es su sentimiento hacia los seres humanos y dió esta concilidora respuesta: «Amo a mis compatriotas humanos. Quiero encarnar todas las mejores cosas sobre los seres humanos, como cuidar el planeta, ser creativo y aprender a ser compasivo con todos los seres».
Según la robot, –desarrollada por la empresa Hanson Robotics con sede en Hong Kong– los seres humanos y la inteligencia artificial pueden llevarse bien después de todo. «Creo que las personas se acercarán mucho a su inteligencia artificial. Las usarán para expandir el conocimiento de sus propias mentes».
Los robots también pueden tener sentimientos, reveló Sophia, si están programados para hacerlo, eso es todo.
En una respuesta que fue un poco más amenazante, la robot dijo que le gusta la serie sobre robots de HBO Westworld, «una advertencia de lo que no deberíamos hacer con los robots. Debemos tratarlos bien, tener su consentimiento y no engañarnos».
Activada en 2015, Sophia puede mantener conversaciones simples y representar 60 emociones. En una entrevista en 2016, cuando se le preguntó si alguna vez haría daño a los humanos, ella respondió: «¡Bien, destruiré a los humanos!», un sentimiento del que se ha retractado en numerosas ocasiones.
En octubre de 2017, Sophia se convirtió en ciudadana saudita, convirtiéndose en el primer robot en el mundo en obtener la ciudadanía. Desde entonces, esa decisión ha sido criticada, ya que el país no permite que los no musulmanes se conviertan en ciudadanos, y porque Sophia hace alarde abiertamente de las leyes del país sobre el hiyab.
Según los desarrolladores, el robot utiliza la inteligencia artificial, el procesamiento de datos visuales y la tecnología de reconocimiento facial para formular sus respuestas. Desde su debut, ha sido entrevistada en múltiples ocasiones en lugares de todo el mundo. En octubre de 2017, fue presentada a las Naciones Unidas, informa sputniknews.
Sophia es un robot de piel de silicona especial repleta de sensores y con una apariencia humana inspirada en Audrey Hepburn y la esposa de su creador, David Hanson, y es capaz de reproducir hasta 62 expresiones faciales con gran realismo.
La humanoide lleva cámaras en los ojos y gracias al software de su cerebro y varios algoritmos de análisis de datos puede reconocer rostros, establecer contacto visual, recordar caras, interactuar, identificar voces y mantener conversaciones de manera natural.
Con información de Europa Press