Por: Edgar Carmona Blanco
A raíz del enorme éxito taquillero que en la actualidad está teniendo “Eso” a nivel mundial, se ha confirmado la producción de la secuela, cuyo estreno está previsto para Septiembre del 2019 .
Y no es para menos considerando la impecable e implacable factura y ambientación de esta cinta de terror basada en la novela clásica del maestro del horror Stephen King.
Se agradece mucho que la historia en esta ocasión haya sido ambientada en la década de los ochentas pues la nostalgia de esa época es revivida y retratada fielmente, justo cuando un grupo de infantes inadaptados que habitan tristemente en un pueblo en donde extrañas desapariciones ocurren; tienen que hacerle frente a todos sus miedos encarnados en la figura del ya emblemático payaso terrorífico de nombre Pennywise, un demonio devorador de niños.
Sobre este renglón, resulta muy divertido e hilarante el humor negro que el payaso le imprime a todas sus geniales y macabras apariciones (al menos para este humilde servidor), es en pocas palabras, la pesadilla viviente de todo niño.
Pero más allá de que esta exitosa película pertenezca al género del terror y casi todos sus derivados (thriller, slasher, suspenso, gore, splatter, etc.), el mensaje final es mucho más alentador que los sustos que pudieran ofrecer las oscuras y sangrientas secuencias, pues no solo es un relato acerca de la amistad, el amor puberto y la valentía, sino que también revela una cruda verdad en estos tiempos aciagos: El verdadero monstruo no es un payaso, es el ser humano.